Los mercados centrales de toda España que se abastecen de empresas depuradoras y comercializadoras gallegas han multiplicado sus pedidos en vísperas de Navidad. En algunos casos se quintuplica la demanda de producto, tanto si se trata de mejillón como de otros bivalvos, especialmente almeja, navaja, longueirón, berberecho y productos similares.

Lo mismo puede decirse en el caso de las cetáreas y los mayoristas que compran en las lonjas para distribuir por toda España centollo, nécora, camarón, percebe, bogavante, buey, erizo y otras delicias de las rías gallegas o sus aguas atlánticas con especial tirón en esta época del año.

Puede decirse que a estas alturas del ejercicio, con las fiestas navideñas a la vuelta de la esquina, se vive una auténtica "revolución", sin duda propiciada por la alta calidad que se presupone a pescados, mariscos y cefalópodos gallegos.

Para que el lector se haga una idea del ritmo al que se trabaja en depuradoras y/o centros de expedición puede citarse el caso concreto de Mariscos Sálvora, una empresa de depuración y distribución asentada en Vilaxoán (Vilagarcía de Arousa).

María del Carmen Figueira, administradora y responsable comercial de esta firma, que distribuye su producto por toda España y en Italia, explica que "estos días estamos trabajando a tope, quizás un 300% por encima de lo que sería el ritmo habitual".

Esto se debe, precisamente, a la creciente demanda de mercancía desde que empezó el mes de diciembre; unos pedidos que aumentan prácticamente cada jornada que pasa.

La propia Carmen Figueira sostiene que en Mariscos Sálvora venden a Merca Madrid, Merca Zaragoza, Merca Bilbao y, en general, a todos los "mercas" de España. "Tenemos un promedio de ocho clientes por cada uno, excepto en el de Valencia, donde tenemos exclusividad con uno, y en todos ellos la demanda se ha disparado", manifiesta.

En este sentido puntualiza que "el mercado que menos pedidos hace triplica los que hace en cualquier otra época del año, pero hay algunos que pueden quintuplicar la demanda de producto".

En el caso del cliente valenciano al que aludía anteriormente "puedo decir que es capaz de encargar alrededor de 40.000 kilos de mejillón en un solo día", declara.

Pero en esta depuradora vilaxoanesa no solo trabajan el "oro negro" de las bateas, sino que mueven todo tipo de productos que envían, como queda dicho, a un buen puñado de clientes, sobre todo a los mercados centrales españoles, aunque también pueden adquirirse directamente, en la propia planta.

En el caso de la almeja babosa, que se extrae en Carril, se comercializa en esta época a aproximadamente 20 euros el kilo. Pero también venden berberecho procedente de los bancos marisqueros de Noia, con una tarifa va desde los 4 euros que cuesta el mediano hasta los 9 euros por kilo fijados para el de calidad extra.

Otros productos destacados son el longueirón, a 9 o 10 euros, dependiendo siempre del tamaño, y la navaja, que oscila entre 12 y 16 euros.

Sin olvidar al relojito, un bivalvo barato "que va muy bien para arroces y fideos y que sale estos días a un máximo de 3,50 euros", mientras que la almeja japónica de Carril puede suministrarse a entre 8 y 15 euros y la almeja rubia, también de la ría de Arousa, a aproximadamente 12 euros el kilo.

Tras aclarar que todo ello es producto gallego, "porque nos volcamos con los mariscos de nuestras rías", María del Carmen Figueira confirma que, a petición de ciertos clientes, en esta depuradora también disponen de producto foráneo.

Pone como ejemplo el "ameixón" que les llega desde Portugal. "Es una especie de almeja gigante de color rojizo que en Galicia tiene muy buena calidad, sobre todo en Muros y Cangas, pero este año no hay, y dado que nos la piden la traemos del país vecino", relata la comercial de Mariscos Sálvora.

Como también es importado, "porque aquí en Galicia casi no queda", el caramujo que llega a esta planta de Vilaxoán desde Irlanda. "Trabajamos dos tamaños y vendemos a 8,50 el grande y a 7,50 el mediano", explica María del Carmen Figueira.

Acto seguido incide en la importancia del caramujo y asevera que "tiene mucha demanda en Madrid, y prueba de ello es que el jueves enviamos 200 kilos a un solo cliente o que a lo largo del día podemos llegar a vender 500 o 600 kilogramos de esta especie".