José Cacabelos vuelve a la carga y, como ya hizo en su anterior etapa como alcalde de O Grove, insiste en denunciar el "abuso" que, a su juicio, comete Portos de Galicia por la "explotación irracional" de la zona portuaria de O Corgo.

Se trata de un viejo asunto, del que se habló hasta la saciedad en las dos últimas décadas, pero que no perderá actualidad hasta que los terrenos en cuestión dejen de pertenecer al ente público dependiente de la Consellería do Mar, ya que se trata de una parcela que en realidad gestiona, explota y mantiene el Concello.

"Pero a pesar de que somos nosotros los que nos hacemos cargo de todos los gastos, Portos de Galicia aún se atreve a cobrarnos cantidades desorbitadas año tras año", lamenta el regidor.

De forma irónica espeta que el ente que preside José Juan Durán Hermida "cobra hasta por respirar" en O Corgo, y a modo de ejemplo señala que la explanada en la que se celebra cada año la Festa do Marisco "no tiene uso portuario alguno, y sin embargo tuvimos que pagar 22.220 euros en 2014, casi 7.500 el año pasado y cerca de 19.000 euros en el presente ejercicio" por ocupar el terreno supuestamente de uso portuario.

Al igual que se paga por organizar las fiestas del Carmen y por otros muchos acontecimientos socioculturales que se llevan a cabo en la zona.

A esto se suma, como no, el canon que paga el ayuntamiento por la Casa da Terceira Idade, por el pabellón de los deportes náuticos, la propia casa consistorial, el edificio de la plaza de abastos, la caseta de vigilancia de la playa urbana de Peralto o el mercadillo ambulante que se celebra en O Corgo todos los viernes.

El canon de todo ello suma más de 23.000 euros, que salieron de las arcas municipales con destino a Portos a fecha de 15 de diciembre pasado.

En definitiva, que "Portos de Galicia sigue cobrando por algo que ya no tiene uso portuario", como sucede también en el caso de las terrazas que se asientan en Beiramar.

"Y mientras tanto nosotros recogemos la basura, suministramos agua, adecentamos los jardines, ponemos alumbrado y, en definitiva, mantenemos todos los servicios necesarios", relata el máximo mandatario.

De ahí que Cacabelos insista una y otra vez en lo que considera "un abuso" por parte de Portos, "más acusado aún si se tiene en cuenta que si se produce una caída tenemos que indemnizar nosotros o que si el pavimento está mal es el Concello el que tiene que pedir autorización para mejorarlo y sufragar los costes".

De ahí que el gobierno socialista de O Grove -y no es el único grupo político de la Corporación que opina de este modo- insista en que los terrenos de O Corgo deben pasar a manos de la propia Administración local.

Aunque hasta ahora no sirviera de mucho, ya que "en Portos siguen si dar respuesta a nuestras peticiones, haciendo caso omiso de un sentir generalizado y de algo que es de justicia".

Máxime cuando "también tuvimos que esperar autorización dos años para continuar con las aceras delante de la zona de Beiramar, o cuando además de sufragar todos los gastos tenemos que esperar permiso para cualquier actuación que queramos llevar a cabo en la explanada".

En resumen, que "O Corgo pertenece al Concello de O Grove pero Portos se empeña en explotarlo para obtener ingresos a costa del pueblo", denuncia el primer edil meco.

Y eso no es todo, pues también muestra su enfado al señalar que "todo este esfuerzo ni siquiera tiene recompensa cuando se pide que nos construyan el puerto deportivo, una obra que consideramos imprescindible y que seguiremos reclamando hasta que se haga realidad".