Vecinos y comerciantes de O Grove denunciaban hace días las molestias causadas por las obras que se llevan a cabo en la calle peatonal Pratería, alegando que un mes de actividad ya es demasiado. Pero las quejas van en aumento y se trasladan a otros lugares del centro urbano, convertido últimamente en un caos viario.

Lo cierto es que ya lo era desde hace días a causa de la acumulación y sucesión de obras en diferentes puntos de la villa, pero los perjuicios que pueden causar tales trabajos son mucho mayores con la llegada de las lluvias.

Esto hace que los ciudadanos intensifiquen sus lamentos y hablen incluso de una deficiente coordinación, ya que "no puede ser que el centro urbano esté patas arriba por todas partes".

Los cierto es que estos días se están viendo afectadas la calle de la Iglesia, Luis Seoane, Praza de Arriba, Rúa da Praza y la citada calle peatonal de Pratería, entre otros puntos de O Grove.

Se realizan trabajos de todo tipo, ya sean de canalización de tuberías para la dotación o mejora de servicios básicos, como de reposición de la plataforma de rodadura, como sucedió ayer en el Cruce do Guardia.

Incluso los que entienden que este tipo de obras son necesarias y que es inevitable que causen molestias sostienen que "las cosas se están haciendo mal".

Citan como ejemplo lo sucedido ayer en el Cruce do Guardia, donde hace unos días rompió la tubería del agua, pues a causa del asfaltado la circulación rodada estuvo "colapsada en hora punta, y ni siquiera había un agente de la Policía Local para poner un poco de orden", lamentan los vecinos.