El Concello de Meaño estudia realizar una actuación de reafirmado del saneamiento a la altura de Abuín, para de esta forma subsanar el vertido de aguas residuales al río Chanca, que se piensa es debido a un hundimiento de terreno en ese punto por el que circula la tubería de la red. El vertido en cuestión fue denunciado hace una semana por la asociación de vecinos Santa Lucía de Dena a través de su presidente Nemesio Viñas, quien se hacía eco del malestar de los vecinos que, aseguraban, llevaban tiempo sufriendo este foco de contaminación.

Una semana después el vertido de aguas fecales continuaba ayer en cantidad importante, propiciando que las aguas del río bajaran turbias y sucias a partir de ese punto, y se percibían en ese estado aún a la altura del puente de la parte baja de Abuín, a una distancia de unos 500 metros del origen del foco en cuestión.

Preguntada sobre el particular la alcaldesa Lourdes Ucha reconocía que el concello había inspeccionado la zona "pero parece descartarse que se trate de algún tipo de obstrucción en la red". "Lo que ocurre -explica la regidora-, es que en esa zona en concreto el terreno tiene poca pendiente y parece que pudo haber cedido el suelo en algunos puntos propiciando cierto hundimiento de la tubería, y eso es lo que puede estar motivando que el agua no circule con normalidad y que salga al río a través del aliviadero". Ante ello Lourdes Ucha aclara que "serán los técnicos que vuelvan a inspeccionar la zona estos días los que decidan la obra que se precisa, pero todo parece indicar que será necesario compactar el suelo y asentar de nuevo la tubería para que esta desagüe con normalidad en ese punto".

Alertado el 112

Las aguas fecales llevan tiempo -Nemesio Viñas apunta incluso que los vecinos le hablan de casi dos años- vertiendo directamente al río Chanca a través de un tubo de saneamiento que, a modo de aliviadero, asoma al cauce del río encastrado entre un talud de piedras. Desde esa tubería se precipita estos días una cantidad ingente de aguas. A lo largo de la semana el caudal del tubo en cuestión varió, incluso no vertió en algunas jornadas, si bien ayer sábado volvía a hacerlo de forma considerable.

Desde la asociación de vecinos Santa Lucía se alertó la pasada semana a los servicios del 112 y el presidente Nemesio Viñas refirió como técnicos de una empresa especializada recogían muestras de agua para proceder a su análisis en laboratorio.

La zona de Abuín es, junto con la de Os Pasales en Dena, la más delicada de la red de saneamiento en Meaño. Y es que su pendiente, que oscila entre los 0,50 y 0,70 centímetros por cada 100 metros, es la más baja de todo el tramo, lo que dificulta la caída de las aguas y favorece las obstrucciones. El asunto reaviva la polémica sobre el proyecto conjunto Meaño-Sanxenxo por el que se pretende conectar las aguas residuales del polígono industrial de Nantes a la red de saneamiento de Meaño para bajarlas por ella hasta la EDAR de Os Pasales. La obra conllevaría sustituir a partir de Abuín -lugar de la conexión- la actual tubería de 300 por otra de 500.