La limitación presupuestaria de los ayuntamientos de la ría de Arousa y la falta de otras ayudas de la administración para hacer frente a los residuos que se acumulan en los arenales, algunos de ellos procedentes del mar y otros dejados por ciudadanos incívicos en actividades de ocio, lleva al colectivo Ao Xeito, de A Illa de Arousa, a organizar periódicamente programas de voluntariado para mantener limpias las playas y la costa. Ayer tuvo lugar en el arenal de Cabodeiro una de las mayores convocatorias de la temporada, ya que acudieron unas treinta personas que retiraron medio camión de residuos de este espacio natural.

Daniel García, directivo de Ao Xeito, al final de la actividad, agradecía la colaboración del Concello de A Illa de Arousa por la aportación del transporte para el traslado de los residuos al punto limpio, con la esperanza de que este tipo de ayuda se repita no solo en este municipio, sino en el resto de los de la ría en los que la agrupación realiza este tipo de actuaciones.

"Hacemos quedadas periódicamente porque nuestra inquietud es hacer una aportación social y también concienciar a la gente sobre la necesidad de cuidar el medio ambiente. En las playas de la ría de Arousa se acumulan residuos, muchos de ellos procedentes de las actividades pesquera y marisquera, pero también derivadas del ocio estival. No existe conciencia real en gran parte de los ciudadanos del mal que estamos haciendo al medio cuando enterramos en la arena los restos de una merienda, en lugar de llevarlos a un contenedor. La basura sale a la luz en algún momento, mayoritariamente compuesta por plásticos, y se va descomponiendo en partículas que terminan en la cadena trófica porque la comen los peces", expone Daniel García.

La falta de presupuesto para asumir los costes de la limpieza de las playas y costas lleva a los ayuntamientos a contratar estos servicios específicamente para la época estival, que es cuando mayor número de personas acuden a disfrutar de las zonas de baño. El problema es que no existe educación ambiental y que la gente opta por enterrar en la arena los restos de la merienda o por dejar la basura en un costado. Pero a lo largo del año, con los cambios de mareas y vientos esos residuos terminan desenterrados y son arrastrados a otras zonas. Papel albal, plásticos, envases de productos lácteos, bolsas de bocadillos y golosinas forman parte del panorama contaminante en las playas.

Pero también aparecen en los arenales restos de aparejos de pesca, palos y cuerdas de bateas. "El problema es que ahora muchas de las bateas se hacen de plástico porque es más barato y los palos que están apareciendo últimamente son de este material contaminante", apuntó el directivo de esta agrupación ecologista.

Ao Xeito realiza una vez al mes quedadas en distintas playas y zonas costeras de la ría de Arousa desde hace dos años. Además de los arenales de A Illa, los miembros de este colectivo realizaron esta actividad en la costa cambadesa; en las playas de As Sinas y O Terrón, en Vilanova de Arousa; en la de A Concha-Compostela, en Vilagarcía e incluso en arenales del municipio de Ribeira. Eligen algunas playas que, por las corrientes marinas o por la acción especial de las sudestadas, suelen recibir el mayor número de residuos. En el caso de las que están más próximas a la boca de la ría se encuentran bolsas que envasaron productos elaborados en Rusia o China, entre otras nacionalidades, lo que consideran como parte de un "sentinazo" de los buques mercantes que navegan por la costa.

"Solemos recoger una media de ocho sacos de basura de 30 litros cada uno cada vez que hacemos este tipo de limpieza medioambiental", expone el representante de Ao Xeito.