Los cuatro informes emitidos por los trabajadores del Concello de Vilagarcía en relación con la caída de la barra del bar del recinto de Fexdega sobre tres niños indican que se trató de un desgraciado accidente y no de una negligencia, según puso de manifiesto ayer el gobierno municipal.
Sobre los supuestos desplazamientos del mostrador que provocó el accidente, uno de los informes indica que la práctica de anclar y desanclar esta barra de cafetería sin uso en Fexdega comenzó y acabó en el anterior gobierno municipal. La justificación del movimiento de esta instalación durante esa etapa fue la de ganar espacio en una zona que, por sus reducidas dimensiones respecto al vestíbulo o al propio pabellón ferial, se adapta mejor para la práctica del deporte o pequeñas representaciones, y por las razones que fuesen, en algún momento a alguien se le olvidó volver a anclar la barra.
El informe dice que "a día de hoy, entre el personal y los usuarios se comenta que el anterior director deportivo dio instrucciones al operario de servicios destinado en el recinto para trabajos de mantenimiento de mover el mostrador, siendo posible que en algunas de estas ocasiones quedase, por olvido sin fijar al suelo".
El alcalde, Alberto Varela, puntualizó que detectado el problema se buscaron soluciones y sobre todo atender a las víctimas. "A mi lo que me preocupa es la salud de los niños, ayudar a los padres a poner los medios para que sucesos así no se repitan. Allá los demás con su ética y el intento de sacar rédito de una desgracia" declaró.
