La nueva línea eléctrica instalada bajo el Camiño do Carro para iluminar Cortegada y los viveros de marisco que rodean la isla todavía no funciona. La Cofradía de Carril aprovechó las últimas mareas vivas (entre el 14 y el 18 de noviembre) para ejecutar la obra. Los trabajos pudieron realizarse sin problemas durante aquellos pronunciados episodios de bajamar, pero durante el periodo de pruebas de la nueva conexión surgieron complicaciones que impidieron que entrase en funcionamiento. Así, tanto la isla perteneciente al Parque Nacional Illas Atlánticas como los parques de cultivo que la rodean llevan casi dos semanas a oscuras.

La iluminación de esta zona es competencia del pósito carrilexo. El patrón mayor, José Luis Villanueva, explica que una empresa externa contratada por la cofradía es la que se encarga del mantenimiento del alumbrado. Sus técnicos tuvieron que localizar la avería a lo largo del tendido eléctrico, el cual discurre bajo el mar, entre Carril y Cortegada. Finalmente detectaron un sobrecalentamiento que ya han solventado, por lo que Villanueva espera que esta noche la joya carrilexa pueda volver a lucirse en todo su esplendor.

Durante los días que estuvieron inoperativas las luminarias de la isla, la Cofradía reforzó la vigilancia en la zona, sin que se detectara una importante presencia de furtivos.

Recuperación del camino

El pósito y la agrupación de parquistas acordaron recuperar al tránsito el Camiño do Carro con motivo de la sustitución del viejo cable que proporcionaba suministro eléctrico a Cortegada. Y es que al estar en contacto directo con el agua, sin ningún tipo de recubrimiento, resultaba peligroso, pues atravesaba varios viveros. Así las cosas, aprovechando que el nuevo tendido eléctrico se cambiaba de emplazamiento (bajo Camiño do Carro) y que obligaba a abrir una zanja por el tradicional sendero, cofradía y parquistas decidieron allanar el terreno y ensancharlo para devolverle su aspecto original.

Antiguamente se llegaba caminando a Cortegada por este sendero. Sin embargo hoy en día hay hay una zona, la del canal, que nunca llega a secarse.

Durante décadas estuvo prácticamente intransitable, cubierto de piedras de grandes dimensiones e incluso invadido por los furtivos, que no dudaban en faenar sobre el propio camino, lo que repercutía negativamente en los viveros colindantes.

Una excavadora contratada por el pósito allanó el terreno durante las mareas vivas de hace dos semanas y ahora queda pendiente delimitar con estacas el sendero. También se colocarán señales de advertencia y prohibición, como por ejemplo en lo relativo a faenar en el propio camino. Asimismo, se informará mediante carteles de las zonas de mayor calado para la navegación.

La recuperación del Camiño do Carro como consecuencia de la instalación bajo el mismo de la nueva conexión eléctrica de Cortegada también servirá para que Illas Atlánticas traslade a tierra la madera cortada y almacenada en la isla. Previsiblemente el transporte se hará en tractor por el tradicional sendero.

Si bien estaba previsto iniciar los trabajos la semana pasada, las nuevas previsiones apuntan al menos hasta mediados de diciembre a la espera de episodios de bajamar importantes, pues la mareas actuales son pequeñas y no ofrecen un margen de maniobra amplio para efectuar el traslado de los 400 eucaliptos talados.

Por otra parte, Portos de Galicia publicó ayer en el DOG un anuncio mediante el cual somete a información pública la modificación por revisión de la concesión administrativa de la lonja de Carril debido a las obras de ampliación ejecutadas por la Consellería do Mar en las instalaciones, que han ganado 114,04 metros cuadrados.