El Concello de Vilanova de Arousa continúa muy lejos de cumplir las normas fijadas por el Ministerio de Hacienda a la hora de hacer frente a las obligaciones de pago a proveedores. Así lo apuntaba ayer la formación Gañemos Vilanova, encabezada por la edil Elena Cores, que destacaba el hecho de que el período de pago se ha fijado en 284 días, cuando lo que establece la ley es que se abonen las facturas en 30. Esta demora tan alta, entienden desde la formación, coloca al Concello en una situación límite, ya que se expone a ser intervenido por el Estado al incumplir las obligaciones de pago.

Desde Gañemos se denuncia que el gobierno del Partido Popular "permanece impasible ante las recomendaciones de intervención, ya que en su propio informe, la funcionaria estatal recuerda que el incumplimiento o no adopción de algunas medidas tendentes a mejorar este aspecto para el ejercicio 2012-2016 del plan de ajuste, ya que, si no se aplican, se caerá en un importante desvío en el calendario fijado en ese plan".

La formación que encabeza Elena Cores también denuncia la eliminación de la orden del día del próximo pleno, que se celebrará el lunes, de una moción impulsada por Gañemos, en la que se reclamaba "información económica detallada de cada producto que se compra en el Concello, una negativa que demuestra los problemas que Gonzalo Durán tiene con la democracia y la transparencia".