Dado que en la charla del Club Faro sobre nuevas tendencias en turismo van a ponerse sobre la mesa todo tipo de posibilidades, el decano de la prensa nacional ha querido preguntar a los dos oradores cuáles son las posibilidades de O Grove como destino ornitológico, después de que en los últimos años el contacto con la naturaleza y la observación de las aves ganaran enteros en la oferta de la localidad.

Eduardo Martínez, especialista en temas de ecoturismo y todo aquello que ponga en valor el patrimonio, sostiene que "todo depende de la vara con la que se mida, pues si se trata de generar un turismo de mucha cantidad de gente está claro que la ornitología no sirve, mientras que si se persigue atraer turistas muy especializados y sensibles que generalmente no tienen problemas para gastar dinero, la observación de las aves es un buen complemento".

Lo que quiere decir es que "el turismo ornitológico tiene cada vez más adeptos, y en O Grove se ha trabajado mucho desde el punto de vista ornitológico".

Pero "sigue habiendo un problema, y es que la gente no se lo acaba de creer y el operador no coge este producto con firmeza para empezar a manejarlo y atraer aficionados".

Como sucede en otros ámbitos o con otras potencialidades, la ornitología "se ve como algo que está ahí y se espera a que atraiga gente por sí sola, pero en realidad hay que moverse en los mismos canales por los que se mueven los observadores de aves y atraparlos para que vengan".

A modo de conclusión, Eduardo Martínez sostiene que la ornitología "debería funcionar en O Grove si se explota convenientemente, convirtiéndola en una línea de producto adicional para que algunos empresarios la utilicen en sus ofertas, siempre y cuando se transmita y comercialice adecuadamente".

Por su parte, María Isabel Míguez sugiere que la ornitología es una vía en la que O Grove debe trabajar "porque muchos destinos siempre venden lo mismo y esto puede diversificar y motivar a determinados clientes para acudir a este municipio y no a otros lugares".

En este sentido, la profesora aclara que "muchos destinos buscan nichos turísticos especializados, y la ornitología puede serlo; es cierto que puede ser una propuesta limitada porque no interesa a todo el mundo pero es un elemento más que se puede presentar como atractivo para ayudar de manera decisiva a desestacionalizar y diversificar la oferta grovense".