El efecto de las mareas dejó a Vilanova sin uno de los pocos arenales urbanos que poseía, el de A Braña. Desde hace años, el Concello lleva reclamando la regeneración de este pequeño espacio situado entre el puerto deportivo de Vilanova y la emblemática playa de As Sinas, para que pueda ser utilizada ya el próximo verano.

El regidor vilanovés, Gonzalo Durán, con la llegada del nuevo gobierno a la Moncloa, va a tratar de reactivar ese proyecto, una actuación que estaba presupuestada en unos 400.000 euros, pero lo que dispara el precio de la misma es el transporte de los áridos, que se realizaría desde A Guarda, donde Vilanova ha encontrado una arena adecuada tanto para el turismo como para el marisqueo.

El arenal de A Braña desapareció debido a las corrientes provocadas por determinadas actuaciones portuarias. El objetivo de esta recuperación es regenerar y consolidar una playa urbana en Vilanova, uno de los atractivos turísticos que le falta al municipio en estos momentos.

La regeneración iría acompañada de la construcción de un pequeño vial que una la zona de As Sinas con el entorno del puerto deportivo de Vilanova.

Recuperar ese entorno es la última gran actuación que pretende hacer el gobierno vilanovés en el litoral, después de haber eliminado la nave de Charpo o la pasarela peatonal de O Terrón.

Que la playa vuelva a existir tiene un profundo valor sentimental para los vilanoveses, ya que A Braña se esfumó entre los años 70 y 80 del pasado siglo debido al efecto de las mareas y de los rellenos que se han realizado en las proximidades. Con la construcción del espigón del nuevo puerto deportivo, en Vilanova creen que la aportación de áridos a la zona no va a sufrir ningún contratiempo, ya que el relleno evita que la arena se vaya de la zona.