La Guardia Civil ha detenido al propietario de un bar situado en una céntrica calle de Vilagarcía por un presunto delito contra la salud pública, concretamente de tráfico de drogas. Los agentes se incautaron en distintas estancias del local de 397 gramos de hachís y 17,4 de cocaína, dinero en efectivo, una báscula de precisión y una importante cantidad de envoltorios plásticos "perfectamente recortados y adaptados para el empaquetado, distribución y venta de las dosis", explican fuentes oficiales de la Benemérita en un comunicado.
Los funcionarios de la Patrulla Fiscal y Fronteras de Vilagarcía se disponían el viernes a última hora de la tarde a realizar en el bar una inspección de carácter rutinario en el ámbito de sus competencias -fiscales-, cuando se encontraron a cinco clientes fumando hachís.
Tanto los clientes identificados como la propia camarera del local -a la que se le decomisó una pequeña cantidad de hachís que guardaba en una cajetilla de tabaco en el interior de su bolso- fueron denunciados por tenencia y consumo de estupefacientes en un establecimiento público.
La operación se desarrolló en El Peñón, un bar de la calle San Roque que lleva muchos años en funcionamiento. La Guardia Civil denunció al dueño del negocio por permitir el consumo de droga en su interior, así como por tener a la venta varias botellas de licores que no tenían etiquetado ni precinto fiscal y dos de vino blanco sin etiquetado ni tampoco registro sanitario.
Los agentes del instituto armado procedieron a la detención del propietario del local por un presunto delito de tráfico de drogas. El arrestado fue puesto ayer a disposición judicial y tras pasar por el juzgado quedó en libertad con cargos.
