La propuesta que el alcalde de Vilagarcía Alberto Varela lanzó al patronato sobre la disolución del patronato de Fexdega y la asunción municipal del recinto de A Maroma ha provocado la reacción de empresarios y partidos políticos pues supone enterrar un proyecto ligado a Vilagarcía de Arousa desde hace más de 35 años y que ha supuesto un desembolso próximo a los veinte millones de euros.

El PP considera que la decisión está demasiado "verde" y requiere además un prolijo proceso en el que se debe contar con la aceptación de la Xunta de Galicia.

Con todo, en la reunión del patronato, el pasado martes, tampoco han definido su postura con claridad los representantes de los demás grupos de la oposición.

El portavoz municipal, Tomás Fole solo reprocha a Varela, como presidente del Patronato, su absoluto "desconocimiento sobre el futuro del recinto, de los nombramientos aprobados y hasta del proceso, las gestiones y los plazos a seguir para hacer efectiva esa supuesta disolución del Patronato que lleva rumiando un año".Y la crítica la realiza a través de un comunicado de prensa, en el que el portavoz popular se muestra sorprendido de que "tras todos estos meses no tenga la más remota idea de lo que conllevaría este proceso, ni cómo tiene que hacerlo".

Cuestiona que el alcalde ni siquiera haya marcado plazos para esa disolución. "Este comportamiento demuestra una vez más la falta de rigor, de trabajo y desidia" pues se trata de un asunto "especialmente relevante para la ciudad" aunque luego solo matiza su decepción porque el PP "dejó tres importantes proyectos para dinamizar y revitalizar el futuro del recinto de A Maroma".

En concreto recuerdan que el objetivo pasaba por la construcción de aseos y vestuarios exteriores, la pista de parqué en el interior y las multideportivas exteriores.

Muchos empresarios de O Salnés se muestran decepcionados pues apostaron por la dinamización de un recinto ferial en el que las administraciones han gastado una suma millonaria a lo largo de los últimos años.

En diversas fuentes se recuerda que este tipo de instalaciones feriales han nacido con un propósito de dinamización de las ciudades, que en el caso de Vilagarcía ha sido cercenado por sucesivas decisiones políticas.

Cabe recordar cuando la Consellería de Industria decidió apartarse del Patronato por el elevado coste anual que suponía el mantenimiento de una fundación que estuvo muy mal gestionada en los últimos años, y que solo reportaba más costes.

Luego se apartó la Cámara de Comercio, también implicada en un proceso de fusión con sus homólogas de Pontevedra y Vigo, ciudades que cuentan con sus propios recintos feriales. Ahora es el Ayuntamiento el que propone disolver la Fundación ferial con lo que tendría luz verde para organizar actos de interés exclusivo de Vilagarcía sin contar con el resto de O Salnés.