La asesoría técnica contratada por el patronato de la fundación asilo hospitalillo "Divina Pastora" de Vilagarcía de Arousa y la representación de las trabajadoras de esta residencia iniciaron ayer la ronda de negociaciones para llegar a un acuerdo en relación con el cumplimiento del convenio colectivo del sector que vienen demandando desde hace un año.
Del primer encuentro solo ha trascendido que continúan negociando, sin que por la parte sindical se hicieran valoraciones sobre el resultado de lo abordado.
La precaria situación laboral de la plantilla de la residencia Divina Pastora fue denunciada públicamente a finales del pasado mes, ante la impotencia de las 46 trabajadoras debido a la negativa de la dirección a acatar el cumplimiento de lo establecido en el convenio colectivo del sector.
Entre los puntos demandados por la representación de la plantilla figura la compensación de los festivos trabajados; así como el disfrute de los días de libre disposición que figuran en el convenio colectivo.
Otro de los incumplimientos denunciados por la plantilla se refiere a la ropa de trabajo. El acuerdo del sector de residencias privadas suscrito por la patronal (entre las que figura la propia directora del asilo de Vilagarcía, Celina Rey en representación del colectivo empresarial Acolle en el que está integrado la residencia) establece que deben entregarse uniformes de trabajo dos veces al año a las trabajadoras.
En el asilo de Vilagarcía este precepto solo se cumple, en parte, con las trabajadoras fijas, que son cuatro del total de 46 que desempeñan funciones laborales en este centro. Alguna vez las cuatro fijas recibieron ropa de trabajo, pero este año aún siguen esperando por el equipamiento.
El resto de las trabajadoras temporales tienen que comprarse la ropa de trabajo si quieren desempeñar su labor en esta residencia.
También llama la atención la precariedad laboral que sufren ya que las trabajadoras fijas no llegan a ser ni el 9% del total de la plantilla, por lo que también se incumplen las ratios establecidas en función del número de residentes en el centro.
La residencia Divina Pastora cuenta en la actualidad con 102 plazas de las que 54 son concertadas por la Xunta de Galicia, asumiendo la mayor parte de las de carácter social, y el resto son privadas, con servicio abonado íntegramente por los usuarios.
