No le será fácil al Ayuntamiento de Cambados vender el Citroën Xsara Picasso de Miguel Ángel Serrano Losana. El coche estuvo abandonado en la calle durante meses, y con un par de ventanillas rotas, por lo que el agua de la lluvia y el frío hicieron estragos en su interior. "Lo más probable es que al final se lo cedamos a alguno de los institutos con el ciclo de Automoción que han firmado el convenio con nosotros", explica el portavoz municipal, Xurxo Charlín.

Este vehículo, que perteneció a una pareja de convictos bautizados en su día como "Bonnie and Clyde" porque a mediados de 2013 estuvieron huidos de la Guardia Civil durante cinco días y consiguieron burlar un par de veces el cerco policial, es uno de los diez que el Concello de Cambados guarda en una nave municipal del polígono industrial de Sete Pías, y que podrá sacar a subasta o regalar dentro de un mes si sus propietarios no los reclaman. "Y es casi seguro que ninguno de los propietarios los reclamará, puesto que tendrían que pagar el coste de tenerlo más de dos años en el depósito". Eso supondría pagar más por el depósito de lo que vale el coche.

Además, hay que tener en cuenta que los dueños de algunos de estos bienes se encuentran en la cárcel, con lo que tampoco disponen de medios materiales para presentarse en el garaje municipal de Cambados y reclamar que le devuelvan su automóvil. Es el caso de Miguel Ángel Serrano Losana y su pareja en 2013, Carmen Castillo Romero, los "Bonnie and Clyde", que están actualmente en prisión y aún les quedan por cumplir casi diez años de condena.

Es habitual que los coches embargados por la autoridad judicial permanezcan mucho tiempo a la intemperie, o medio olvidados en garajes, de ahí que casi siempre estén muy devaluados cuando finalmente se aprueba su venta. Es lo que le ha sucedido al Citroën familiar de Serrano y Castillo. Pero también al Volkswagen Passat con volante a la derecha -como los turismos ingleses- que se le intervino en su día a Mohammadi Pak y Mehrzad Yayebipour, dos iraníes con domicilio en Guadalajara que fueron detenidos a mediados de 2013 por un hurto y dos robos con violencia en Cambados y Sanxenxo.

El coche también ha caído en manos del Ayuntamiento tras todo el procedimiento judicial, y también acusa el mal estado propio de un coche que ha dormido fuera durante meses sin que nadie mirase por él. "Tampoco creo que éste nos compense sacarlo a subasta".

Así las cosas, es probable que tanto el Picasso de los "Bonnie and Clyde" como el Passat de los iraníes terminen en un instituto con Automoción, para que sus alumnos realicen con ellos las prácticas lectivas.

El Ayuntamiento de Cambados ya entregó hace unos meses una furgoneta a un instituto de A Guarda que previamente había dejado una vecina en el depósito municipal, y posteriormente firmó un convenio de colaboración con otros dos centros, de Pontevedra y Sanxenxo. Estos dos institutos ya recibirán uno de los coches que queden sin dueño en el paquete anunciado en el Boletín Oficial del Estado y que no valgan para subastar. Pero Xurxo Charlín apunta que hay más centros interesados, de ahí que posiblemente se liberen más vehículos.

También es probable que se dedique a fines educativos un Hyundai Coupé que apareció un día flotando en el mar, y que posteriormente fue descuartizado por dentro por las fuerzas de seguridad en busca de droga, pues pertenecía a un presunto narcotraficante.

El Concello tampoco sacará a subasta una motocicleta Kawasaki de 600 centímetros cúbicos, puesto que aunque está en buen estado carece de matrícula y bastidor. "Es una moto de competición, preparada para correr en circuito. La recogimos porque estuvo durante meses abandonada en San Tomé. Y como no tiene bastidor ni matrícula ni siquiera se sabe de quién es".

En cuanto al pequeño Kia Rio de Viajes Silgar -empresa que quebró y que estuvo vinculada a la residencia de ancianos Valle Inclán, de Vilanova- tiene un golpe en la parte frontal que le resta interés.

Pero no todos los vehículos de este paquete de notificaciones del BOE están en esa situación. Los hay que sí saldrán a subasta. "Es una forma de ingresar dinero para el Ayuntamiento y de echarle una mano a alguien que necesite un coche barato", plantea Charlín.

Así, las estrellas del depósito de la nave de Sete Pías son desde un Volkswagen Golf en buen estado, hasta un Peugeot 106 o un 306 descapotable. "Y por el remolque ya ha venido gente por el Ayuntamiento a preguntar".