El instituto Castro Alobre de Vilagarcía se convierte durante este curso en el tercer centro de Galicia que imparte la asignatura de Voluntariado Social como parte de su modelo de innovación educativa que ya pusieron en práctica y que persigue implicar al alumnado en beneficio de la comunidad y de su entorno. Iniciativas como un recorrido en silla de ruedas por la ciudad o visitas de distintos personajes y cargos públicos al centro hace unos meses fueron parte de la primera fase de este proyecto, que a partir de noviembre entra en su segunda etapa, con la elaboración de un decálogo de necesidades y la implementación de distintas actuaciones para resolver las problemáticas incluidas en ese documento. Entre las iniciativas a desarrollar por el alumnado destaca su colaboración con diversas entidades sociales de Vilagarcía.

A la presentación de este proyecto asistió ayer la directora xeral de Xuventude e Voluntariado de la Xunta, Cecilia Vázquez, que explicó que esta nueva asignatura del IES Castro Alobre permite a los jóvenes estudiantes desarrollar un itinerario voluntario completo y continuo, que comienza en Primaria con "Móvete", continúa con el "Pasaporte Solidario", para alumnos de hasta 12 años, la Red de Centros Solidarios para estudiantes de Secundaria y, por último, el Servicio de Voluntariado juvenil que se prolonga hasta los 30 años de edad. Cecilia Vázquez afirmó que "las escuelas e institutos deben ser, además de vehículos de aprendizaje, entornos de formación en valores en los que se fomente el compromiso y la solidaridad con distintas causas".

El modelo finlandés

El profesor de Filosofía del instituto, José González, uno de los principales promotores del proyecto, lo define como una apuesta "por un modelo de educación que se implementa en Finladia y otros países europeos, en los que la educación en valores se convierte en una oportunidad para el alumnado en cuanto al dominio de las competencias sociales clave en nuestro entorno". Explica que los estudiantes participarán a lo largo de este curso en proyectos solidarios que "incidan en la educación para el desarrollo, tratando de crear nuevas sinergias de solidaridad que se deben consolidar tanto a nivel educativo como social". Por eso hace un llamamiento a que toda la sociedad se implique y respalde esta "importante labor".