La posibilidad de hacer un deslinde para determinar de quien es propiedad la carretera que une el Hospital de O Salnés con la parroquia vilanovesa de Baión no tiene mucho sentido, sobre todo cuando en la memoria de construcción del vial figura claramente que este pertenece a Fomento. En esa memoria, se especifica que el vial se construyó para comunicar la segunda fase de ampliación del polígono industrial de Baión con el vial de acceso al Puerto de Vilagarcía, a petición de la propia Xestur, ente encargado de construir el polígono.
Finalmente, el vial se convirtió en una simple pista debido a que la crisis económica se llevó por delante la segunda fase del polígono industrial y obligó a su paralización.
El vial quedó construido, pero sin servicio, hasta que el Concello de Vilanova, a través de su regidor, Gonzalo Durán, y el de Vilagarcía, a través de Tomás Fole cuando era alcalde, negociaron con la Diputación para que asfaltase un antiguo camino que partía desde Os Carballos, en Baión, y finalizaba en el entorno.
Ese asfaltado era considerado fundamental por el regidor vilanovés para ahorrar a los vecinos de esta zona un largo recorrido hasta el Hospital de O Salnés, ya que reducía el recorrido a tan solo dos o tres minutos de duración.
Por todos estos motivos, en Vilanova no deja de sorprender que en el vecino municipio de Vilagarcía se siga a vueltas con la titularidad del vial, cuando está más que claro y Fomento nunca rehuyó esa propiedad. Es más, "la asume por completo", apuntaban ayer desde el Concello vilanovés. Desde este Concello sospechan que sembrar dudas sobre la titularidad del vial "solo trata de ocultar la incapacidad del gobierno de Vilagarcía, que estuvo durante un fin de semana sin actuar sobre el vial ni retirar la piedra que lo obstruía".
Mientras Vilagarcía espera por una titularidad que para Vilanova está bastante clara, el vial continúa cerrado ante el riesgo de desprendimientos que pueden registrarse sobre la calzada, una decisión que tomó el gabinete de Alberto Varela tras decidir su homólogo vilanovés retirar las piedras y abrir el vial de manera unilateral y metiéndose en el término municipal vecino.
Fomento respalda en esta decisión al Concello vilagarciano, al entender que existe riesgo de que nuevas lluvias puedan provocar un derrumbamiento y no se puede garantizar la seguridad de los vehículos que puedan transitar por la zona. Por este motivo, va a tomar medidas lo antes posible para eliminar el riesgo, con la instalación de elementos que impidan el desprendimiento de las rocas del talud. Ahora, la incógnita se encuentra en saber cuando, una pregunta que se hacen desde Vilanova de Arousa, en especial desde la parroquia de Baión, ya que el vial era muy utilizado por los vecinos de esa parroquia para llegar al Hospital de O Salnés. Incluso las ambulancias recurrían a él para determinados desplazamientos.
El propio Durán ha manifestado durante toda esta crisis que espera que "el vial se reabra lo antes posible al público, no puede estar cerrado eternamente".
