La Corporación municipal de O Grove debate el lunes en sesión plenaria la aprobación definitiva de la modificación de la "Ordenanza de policía, buen gobierno y medidas para fomentar y garantizar la convivencia ciudadana en el espacio público del Concello". Esto, en la práctica, supone hablar de nuevo sobre la proliferación del botellón y la presencia para muchos "indiscriminada" de las autocaravanas a lo largo y ancho de la localidad.

Ya se explicó en su momento, porque este es un debate vivo desde hace meses, que el gobierno socialista impulsó la modificación de dicha ordenanza para favorecer la presencia de los autocaravanistas en el municipio y permitir que puedan sacarse bebidas al exterior de los locales de copas, aunque eso sí, en recipientes de plástico.

Fue el 30 de mayo cuando se aprobó inicialmente este articulado, abriéndose el 21 de junio el periodo de exposición pública -por espacio de 30 días- a los efectos de que se presentaran las modificaciones o alegaciones que se estimaran oportunas.

Fue así cómo se hizo patente el rechazo a la ordenanza por parte de aquellos que insisten en que las "casas rodantes" no pueden campara a sus anchas por O Grove -circular sí, pero pernoctar donde plazca a sus propietarios, no- o sostienen que favorecer la salida de bebidas de los pubs es tanto como fomentar el botellón y facilitar los destrozos en el mobiliario y la suciedad en las calles.

Y todo esto sin olvidar que con dicha ordenanza también se flexibiliza el uso de monopatines y el juego con la pelota en plazas y vías públicas, lo cual también tiene sus detractores.

Esto es lo que va a debatirse de nuevo en el pleno del lunes, tratando de responder así a alegaciones presentadas por vecinos y el Partido Galeguista Demócrata (PGD).

Esta formación, representada por el edil Alfredo Bea García, se ha mostrado especialmente incisiva en las críticas a la modificación de la ordenanza, aprobada precisamente cuando él tenía responsabilidades de gobierno al frente de departamentos como Limpieza o Seguridad Ciudadana.

Ahora desde la oposición, el galeguista insiste en sus alegaciones, como lo hizo antes de que la modificación fuera aprobada inicialmente, en que "el texto modificado (a propuesta de los socialistas) no busca para nada clarificar lo que es estacionar o acampar, sino que se pretende de facto permitir sin ningún tipo de control que se pueda ocupar espacio público por parte de ciertos usuarios de autocaravanas", permitiéndoles pernoctar "fuera de los espacios habilitados al efecto" y por tanto "haciendo un mal uso del espacio público".

Se basa, una vez más, en que "en caso de encontrarse en tránsito, la ley establece que su estancia -la de las autocaravanas- no podrá superar una noche, y siempre dentro de las zonas habilitadas para tal uso por el Concello".

Esto lleva al PGD a concluir que "no está permitido pernoctar en una autocaravana en los espacios municipales no delimitados para tal fin", es decir, campings o zonas habilitadas expresamente por el Concello, como en su momento propuso el grupo Esquerda Unida y respaldó el PGD.

Antes de que se trate en el pleno, hoy mismo se verán éste y otros asuntos en la Comisión Informativa previa a la sesión. Sobre la mesa se ponen tanto las alegaciones del PGD como un informe jurídico emitido por el secretario municipal, Javier Novoa Juiz, en el que se incide en que es facultad del órgano plenario "regular el estacionamiento de vehículos y su rotación, no incurriendo en ilegalidad o infracción alguna con la nueva redacción (de la ordenanza) propuesta, sin perjuicio de que será mediante el debate y la votación subsiguiente cuando se adopte la redacción definitiva por motivos de orientación y criterios de política social, en este caso en relación con la regulación del estacionamiento de vehículos".