La variante de Valga y Pontecesures en la carretera nacional 550 que proyecta el Ministerio de Fomento contempla la construcción de cinco viaductos, seis pasos superiores y seis pasos inferiores. Algunas de las infraestructuras más destacadas serán un viaducto sobre el río Ulla, de 320 metros de longitud, y otro sobre el río Valga, de 405 metros. Además, los técnicos consideran necesario realizar varios drenajes.

El Ministerio de Fomento somete estos días a exposición pública las cuatro alternativas que existen para la variante, si bien la que está preseleccionada es la 4 (la que contempla los cinco viaductos y 12 pasos superiores o inferiores), al considerar los técnicos que es la mejor. En un primer momento, los vecinos también consideran que esta alternativa es sensiblemente menos perjudicial que las que se plantearon en el pasado.

La nacional 550 es la carretera paralela a la Autopista do Atlántico que comunica algunas de las principales ciudades de Galicia, como Ferrol, A Coruña, Santiago, Pontevedra o Vigo. Se trata, en consecuencia, de un vial con un tráfico muy denso. Esto origina problemas al pasar por los núcleos urbanos, tanto a los conductores, que han de reducir notablemente la velocidad en sus viajes, como para los vecinos, que tienen que soportar la molestia de los ruidos y una mayor inseguridad vial.

Hace años que el Ministerio de Fomento planea construir una variante para Pontecesures y Valga, de modo que la nacional 550 no tenga que discurrir por el centro urbano de estas localidades, pero el proyecto se había retrasado debido a que la alternativa escogida en su día fue rechazada de plano por los vecinos, al considerar que sería muy lesiva para las poblaciones.

Nuevo trazado

En Padrón ya funciona desde marzo de 2015 una variante, lo que ha permitido "disminuir de forma significativa el tráfico de paso" por esta localidad, según el Ministerio de Fomento. Lo que se pretende ahora en Valga y Pontecesures es construir una nueva carretera convencional -con la posibilidad de transformarla en un futuro en autovía- apartada del centro de ambos pueblos. El presupuesto previsto es de 48 kilómetros, y el trazado en la alternativa preseleccionada (la 4) tendría una longitud de 7,3 kilómetros.

La variante comunicaría la intersección de la actual variante de Padrón con la de Bronllo, ya en Valga, donde la nueva infraestructura volvería a conectar con la actual N-550. Entre medias habrá enlaces con los cascos urbanos, con lo que se separarán los tráficos de larga distancia de los locales.