La oposición en bloque pide al gobierno vilagarciano un mayor esfuerzo para que los vecinos puedan notar en los bolsillos la reducción del IBI. BNG y Somos Maioría se conforman con dejar el tipo en 0,55, Esquerda Unida pide llegar hasta el 0,52 y el PP propone que se recorten gastos de otros capítulos para que sea posible una reducción "de varias centésimas porcentuales".

El portavoz de los populares, Tomás Fole, pide que se "racionalicen recursos" en el capítulo de personal para reducir los 10 millones de euros que supone al año. Además, plantea "priorizar las inversiones adscritas al plan Feder -que acaba de conceder al Concello 5 millones de euros- para desbloquear fondos municipales de manera que, lo que se deje de ingresar vía impuestos, se compense con una moderación de los gastos. Porque, insiste Fole, el tipo impositivo del 0,56 supone en muchos casos "una escalada en los recibos. Cuesta creer cómo pretende el PSOE que no le pase factura política querer ingresar más" en concepto de IBI.

El lunes los distintos partidos retoman las negociaciones con vistas a poder alcanzar un acuerdo antes del pleno del martes.