Lar es una fundación y asociación sin ánimo de lucro que tiene contratos en algunas materias con la administración pública. Su finalidad es la integración psicológica, social y laboral de las personas que padecen trastornos mentales, y cuenta para ello con varios recursos. Entre estos se encuentran una pequeña residencia de 24 plazas para adultos, un centro de menores (Chavea), pisos tutelados, una escuela de familias o el centro de rehabilitación, situado en A Laxe.
Procuran la integración tanto proporcionando a los pacientes herramientas para mejorar su autoestima y su autonomía personal en las residencias y pisos tutelados, como mediante la celebración de cursos y talleres específicos. Amelia Varela señala que en ese caso se realiza una prospección del mercado laboral previa, y que posteriormente los cursos son impartidos por profesionales en la materia contratados específicamente para la ocasión.
A modo de ejemplo, la directora-gerente de la asociación explica que hace años supieron que una panadería necesitaba contratar a dos trabajadores. Lo que hizo Lar fue convocar un curso de panadería, en el que inscribió a 14 personas, y al término del curso la panadería escogió a los dos que más le gustaban.
La entidad cuenta actualmente con 140 usuarios (a los que habría que sumar los familiares que acuden a la escuela de familias) y también realiza con asiduidad actividades de formación para voluntarios. Acuden además a colegios e institutos porque en palabras de Amelia Varela "para luchar contra el estigma hay que trabajar con la base", que son los niños, y, sobre todo, los adolescentes.
La mayoría de los usuarios de Lar son mayores de edad, y entre estos en torno a un 90 por ciento se les ha diagnosticado esquizofrenia. En estos momentos hay lista de espera tanto para la residencia como para el centro de rehabilitación.
