Un golpe del que va a resultar muy difícil recuperarse. Así definía ayer el propietario de la empresa Iluminaciones Umia, Serafín Janza, los efectos del asalto que sufrió su empresa en la madrugada del domingo, un asalto en el que participaron, al menos, hasta siete encapuchados, que se llevaron gran parte del material que la empresa tenía almacenado para instalar durante las fiestas de San Froilán en Lugo y para iluminar las navidades en diferentes Concellos de Galicia. Todo ese material (32 cuadros eléctricos y 30.000 metros de cable trenzado entre otros elementos) tiene un coste aproximado de 200.000 euros, una cifra que supone un importante quebranto económico para una firma como Iluminaciones Umia del que va a ser difícil recuperarse.

El robo se cometió sobre las 1.15 horas y todo fue registrado por las cámaras de seguridad que posee la empresa, donde se aprecia, al menos, a siete encapuchados cargando el material en una de las furgonetas de la empresa, vehículo que se acabaron llevando y que apareció ayer a 13 kilómetros de distancia de Lugo. Al interior de la nave de Iluminaciones Umia, los ladrones accedieron tras reventar una puerta que les permitió abrir el portal, y durante más de 45 minutos, el grupo estuvo en las instalaciones, centrando su búsqueda en aquellos elementos que contenían cobre, un material que posee un importante valor económico, por lo que el propietario de la empresa sospecha que se trataba de una banda organizada que tenía muy claro que era lo que buscaba.

El propio Janza, que vive en una edificación anexa, estuvo muy cerca de encontrarse con los ladrones, ya que llegó a la vivienda tan solo diez minutos después de que los encapuchados hubiesen abandonado las dependencias.

Los hechos han sido denunciados ante la Guardia Civil y agentes de la Policía Judicial estuvieron en las instalaciones recogiendo pruebas para dar con los responsables del robo. No es la primera vez que Iluminaciones Umia sufre un asalto similar, ya que el pasado año, otro grupo de encapuchados intentó acceder al interior de la nave desde el río Umia, "pero no nos hicieron la escabechina que han provocado en esta ocasión".