Un total de 38 personas participaron la pasada madrugada en una peregrinación nocturna a los Milagros de Amil (Moraña), organizada por la comisión de fiestas de Leiro (Ribadumia). Invirtieron unas cuatro horas y 45 minutos en llegar a su destino, y tras escuchar la primera misa del día y dar un paseo por el recinto festivo, regresaron a Ribadumia en un autobús fletado por la comisión.

La actividad fue organizada por la comisión de fiestas que organiza los festejos de San Juan, que es el patrono de Leiro. Fue allí precisamente donde se estableció el punto de encuentro.

Entre los participantes había vecinos tanto de esta parroquia como de Vilariño, Lois, Sisán o Armenteira, y todos ellos llevaban un chaleco amarillo reflectante para caminar con la mayor seguridad posible por la carretera. Les apoyaba una unidad de Protección Civil de Ribadumia, que acudió con un vehículo por si se producía alguna incidencia. Tenían por delante una caminata de 21 kilómetros en plena noche.

Los caminantes fueron por Lois, Paradela, Romai y Porráns, desde donde tomaron la carretera de Moraña y posteriormente la de Amil, donde ayer se celebró la romería de los Milagros, una de las fiestas religiosas más importantes y multitudinarias de la comarca de Caldas.

La expedición llegó a Moraña poco antes de las seis de la mañana, cuando todavía estaba tocando la orquesta. Una verbena que concluyó en el momento en el que las campanas del santuario repicaron anunciando la primera misa del día. Los vecinos de O Salnés acudieron a esta Eucaristía.

Al salir, algunos de ellos dieron un paseo por el recinto, y aprovecharon para realizar alguna compra, como las tradicionales rosquillas. Otros ya aprovecharon para comer algo, pues ya había "pulpeiras" abiertas. Algunas, al parecer, no cierran en toda la noche del sábado al domingo.

Con destino a la fiesta

La peregrinación fue organizada por la comisión de fiestas para recaudar dinero para los festejos de Leiro, con lo cual tenía un coste de ocho euros por persona. La comisión, por su parte, les dio un bocadillo, fruta y agua al llegar a Porráns, para reponer fuerzas antes de encarar los últimos kilómetros hacia Moraña, y costeó el autobús en el que regresó la expedición sobre las 7.15 horas de la mañana.

Una comisión que ha querido mostrar su agradecimiento con el Concello de Ribadumia, con la agrupación de Protección Civil y las distintas casas comerciales que han colaborado con la actividad.

Son muchas las personas que acuden a la romería de los Milagros de Amil caminando. Y en algunos casos lo hacen en "andainas" nocturnas en grupo. Además de la de Leiro, en la madrugada de ayer también salió una desde Castroagudín, en Vilagarcía.

Porque en muchos casos el camino en grupo es precisamente el preludio de la fiesta, o una parte más de la fiesta. Las caminatas a pie aún se mantienen como un elemento fundamental de romerías como la de la Virgen de las Cabezas, en Armenteira.