El Concello de Caldas se ha marcado como uno de sus objetivos recuperar el patrimonio del municipio y para ello rehabilitó la fuente del Pozo y la fuente do Rejo, y el pozo de Andrixe, situadas en el lugar de Paradela. El plan requirió una inversión de 85.000 euros que fueron financiados por el Concello y contó con la colaboración de la Comunidad de Montes.

Los trabajos consistieron principalmente, en el adecentamiento y acondicionamiento del entorno, con la limpieza, encintado y construcción de muros de mampostería, mejora de los accesos, construcción de la cubierta del lavadero con madera y teja, reconstrucción de las canaletas en piedra y nuevas barandillas para proteger el desnivel.

Con este proyecto se trata de preservar la identidad cultural propia del lugar, y el Concello busca recuperar estos espacios para los vecinos y visitantes, "para que los niños puedan conocer algo más de nuestra historia", apuntan desde el gobierno local.

Desde el Concello se considera que un municipio conserve en buen estado los elementos que forman parte de su patrimonio histórico, y las fuentes y lavaderos públicos "son recintos de gran contenido sociológico y etnográfico" que eran un punto de encuentro para los vecinos de la aldea, en los cuales surgían canciones, refranes y leyendas populares".

Los trabajos ya finalizados tendrá su continuidad con la rehabilitación de otros elementos del patrimonio caldense, según afirma el gobierno local.