La comarca de O Salnés acoge hoy domingo la decimocuarta edición de la concentración de coches de época organizada por el club Clásicos Salnés. Varios Rolls Royce, un Ford Mustang, un MG de 1949, un Pontiac Firebird, un Cadillac Eldorado o un Chevrolet Corvett de los que llevan el sistema de carburación sobre el capó son algunas de las joyas que podrán verse a lo largo de la jornada estacionadas en la plaza de Fefiñáns (Cambados) o junto al Ayuntamiento de Vilanova. Pero también habrá Seat 600 y "Minis"... Este tipo de encuentros entre los aficionados a los vehículos clásicos han proliferado mucho en los últimos años, hasta el extremo de que también se hacen de motocicletas y hasta de modelos concretos de una marca, como ha ocurrido con los "Escarabajos" de Volkswagen o los "2 Caballos" de Citroën.
-¿Cuáles son los vehículos más interesantes desde un punto de vista histórico de los que acudirán a la concentración?
-Habrá un grupo de coches americanos, muy bonitos y muy bien conservados, un autobús antiguo de la empresa Cuiña y varios clásicos descapotables de las décadas de los 60 y 70. Pero también habrá muchos clásicos populares, de los que marcaron la historia de la España "yeyé". Así hasta más de 120 coches.
-¿A dónde tienen que ir y a qué hora las personas que estén interesadas en verlos?
-Por la mañana estaremos en la plaza de Fefiñáns, en Cambados, entre las 9.30 y las 12 del mediodía. En el restaurante Forniños, en Tragove, tendremos los coches entre las 12.15 y las 17, mientras comemos, y finalmente estarán aparcados delante del Concello de Vilanova entre las 17.30 y las 19.
-Realizan una travesía por la ría de Arousa, visitan el museo de O Cuadrante... ¿Es la promoción turística del territorio otra de las finalidades de este tipo de concentraciones?
-Nosotros siempre tratamos de poner en valor nuestra comarca, que es muy completa por todo lo que nos ofrece: productos agrícolas, del mar, monumentos, y zonas naturales espectaculares. De esta manera, ponemos en valor el vino albariño, nuestra ría, nuestras playas, nuestros lugares emblemáticos, y también por supuesto la amabilidad y cortesía de la gente.
-¿Es una afición cara?
-No es cara, pero siempre depende del coche o coches que uno tenga. El mantenimiento es como el de un coche normal, donde se puede encarecer es en la dificultad de algunas marcas para localizar repuestos.
-Se dice que es una pasión que engancha.
-Todos estos vehículos transmiten algo que no nos transmiten los coches nuevos que utilizamos día a día, es algo diferente. Para los que somos de los años 60 o 70, han sido los coches de nuestra niñez, y en aquella época los coches eran algo especial y poco accesible. De modo que ahora muchos de nosotros tratamos de conseguir aquello que en aquella época era inalcanzable.
-¿Cambia mucho la sensación de conducir un vehículo de época con respecto a uno actual?
-Mucho, mucho, en un coche clásico sientes la velocidad, los ruidos, el olor, se siente la conducción y todas las partes del vehículo. Eso te hace pensar que es como algo vivo.
-Los automóviles antiguos carecen de muchos de los equipamientos de seguridad de los actuales, como los airbags o incluso los reposacabezas. ¿Se siente seguro cuando conduce uno de esos vehículos en carretera fuera de una concentración como la de hoy?
-Sí, porque tampoco forzamos los coches o vamos a las velocidades que anda uno de uso habitual. Lógicamente no están pensados para lo mismo, ni para las carreteras actuales.
