El desfile de carrozas partió sobre las siete de la tarde con la misión de poner punto y final a las fiestas de Castroagudín. Y, aunque media hora antes, momento en el que estaba previsto en el programa, apenas había gente en el campo de la fiesta, en cuestión de minutos, éste empezó a llenarse de vecinos y visitantes que se disputaban un puesto para poder ver de cerca los vehículos y a las familias enteras que iban sobre ellos. Fue un colorido punto y final a las fiestas de San Roque a las que la orquesta Palladium y el Grupo Bomba pusieron el broche de oro por la noche.
Un colorido desfile
"Estamos esperando a que todos terminen de comer para salir" explicó uno de los vecinos participantes vestido de sanferminero. Por el pueblo desfilaron personajes de todo tipo rodeados de coloridos escenarios. El primero de la comitiva era San Roque que albergaba multitud de billetes en su manto. Los 80´s eran la temática de la primera de las carrozas por lo que las combinaciones imposibles, el atrevimiento y la música no faltaron durante el desfile. Le seguían dos vehículos de los San Fermines que simulaban un encierro real. La familia Paulos Viqueira comandaba una de ellas en la que uno de sus miembros, con un tractor, remolcaba a toda una comitiva vestida de blanco con pañuelo rojo. Además, también llevaban su propio toro confeccionado con bolsas de basura. La idea fue de Ana, una de las hijas de la familia, que pensó en un disfraz fácil y económico. A ellos, les seguían unos jóvenes y elegantes gatos, dos guardias civiles, un "cortatoxos" en su tractor, egipcios e incluso un certamen de belleza con hombres y mujeres subidos a unos tacones y con pelucas de colores. Uno de ellos, aseguró que "para estar bello hay que sufrir" mientras señalaba sus alzas plateadas.
Así, Castroagudín puso fin a una jornada llena de actividades como la Festa da Auga que se celebró en la localidad por la mañana y en la que muchos vecinos salieron a refrescarse aprovechando los últimos coletazos del sol de este verano y asegurando que "a festa non ten que envidiarlle á de Vilagarcía".
