Los productores de mejillón de Chile atraviesan uno de los peores momentos de su historia. La presencia de episodios tóxicos, lo que popularmente se conoce como "marea roja", ha reducido a mínimos la producción de su molusco, el conocido como "chorito". Y esta "catástrofe" para los chilenos, no cabe duda, beneficia a los bateeiros gallegos, que encuentran abiertas más oportunidades de negocio a nivel nacional y europeo.
El año pasado Galicia pulverizó los resultados del anterior en cuanto a venta de mejillón. Y este 2015 arrancó con la misma fuerza, hasta el punto de que algunos productores, depuradores y comercializadores han mejorado sus registros. Esto tiene mucho que ver con la calidad que atesora el producto en la presente campaña, pero también con las dificultades que atraviesan los competidores chilenos.
En el Consello Regulador do Mexillón de Galicia son conscientes de ello, al igual que lo son el conjunto de bateeiros y las industrias transformadoras, incluidas aquellas que suelen adquirir "chorito" y ahora se vuelcan con el producto gallego, de ahí que las descargas en los muelles sean incesantes.
"Desde que se inició el verano austral sucedieron en el sur de Chile una serie de fenómenos que el 29 de abril desencadenaron la declaración de zona catastrófica en la X Región debido a una 'marea roja' de intensidad nunca vista", esgrimen en el Consello Regulador, sabedores también de que "con el comienzo del otoño austral una 'marea roja' paralizante se extendió por el mismo borde costero de Chile con una extensión e intensidad desconocida, provocando el cierre preventivo de todo el litoral".
Así pues, en el país austral están bajo mínimos en cuanto a producción de bivalvos -entre ellos los mejillones-, lo cual trata de aprovechar Galicia colocando la mayor cantidad posible de producto en mercados europeos como el francés y el italiano.
El miedo al cierre ayuda
Las ventas, como se explicó en los últimos días, son muy importantes, quizás las más llamativas de los últimos veranos, a lo cual contribuye igualmente el aumento de células tóxicas que ha provocado ya el cierre de la mitad de los polígonos bateeiros gallegos.
Cabe recordar que según los propios bateeiros temen, este episodio amenaza con extenderse y prolongarse en el tiempo, de ahí que la intención del sector mitilicultor, hay que insistir una vez más, sea colocar ahora todo el producto posible.
Quieren hacerlo antes de que lleguen unas prohibiciones generalizadas de extracción que, según algunos productores, pueden derivar en "un otoño muy complicado" para el sector.
