El novedoso sistema de riego sostenible de la Plaza de España se ha revelado como un auténtico fracaso apenas un año después de finalizar las obras de rehabilitación de este céntrico enclave vilagarciano. La lamentable imagen que ofrecen las zonas verdes de la plaza a las puertas de la iglesia parroquial de Santa Eulalia y en las inmediaciones del conjunto histórico monumental de vista Alegre, con el que conecta a través de la calle Arzobispo Andrade, obligan al gobierno municipal a adoptar medidas. En algunos puntos el césped ya no existe y en otros la hierba está completamente seca debido a la falta de riego. El alcalde, Alberto Varela, achaca esta penosa situación al novedoso sistema de drenaje que incorporó la plaza dentro las obras de rehabilitación acometido en el primer semestre de 2015.

El proyecto fue redactado por la Oficina Técnica Municipal durante el anterior mandato del PP, si bien los trabajos concluyeron ya con los socialistas en Ravella a finales de julio del pasado año. La Plaza de España fue por aquel entonces la primera zona verde de la ciudad en contar con un sistema urbano de drenaje sostenible consistente en cuatro pozos de bombeo de 2.500 litros cada uno soterrados a tres metros de superficie para almacenar agua de lluvia. En teoría, la humedad debía ascender por capilaridad hasta la superficie, repartiéndose por la misma, aprovechando mejor los recursos hídricos y reduciendo la llegada de agua a la red municipal de pluviales. Según explicaba el gobierno local por aquel entonces, la cantidad de agua que llegase al césped dependería del nivel freático, añadiendo que, en el caso de que este sistema no fuese suficiente para humedecer la zona ajardinada, las obras ya habían dejado espacio para colocar unas canalizaciones de riego convencionales.

Y a la vista está que el sistema urbano de drenaje no solo no ha surtido efecto, sino que ha provocado una rápida degradación de la céntrica plaza. Revertir esta situación requerirá de recursos públicos y de obras de consideración, ya que, tal y como explica el alcalde, será necesario levantar el césped en toda la superficie reservada como zona verde para inutilizar el riego sostenible y sustituirlo por otro sistema "más tradicional". "Yo no soy técnico y no sé si está ahí el problema (en el riego), pero lo que está claro es que no funcionaba adecuadamente", comenta Varela. Los trabajos que acometerá el Concello para devolver a este espacio el esplendor que merece también conllevarán un estudio para determinar qué tipo de especie vegetal es más adecuada para ajardinar de nuevo la plaza. "Tenemos que ver qué es lo más adecuado para esa zona, si se mantiene el césped o se cambia por gramón o algún tipo de hiedra", añade el regidor.

Varela anunció la ejecución de estas obras a corto plazo en el pleno del pasado jueves, en respuesta a una pregunta formulada por el concejal de Somos Maioría, Gaspar González Somoza, en la que mostraba su desagrado por el mal aspecto que ofrece hoy en día la Plaza de España y reclamaba "alguna medida de regeneración". En los trabajos de recuperación de este espacio acometidos el pasado año el Ayuntamiento invirtió 224.709 euros. Buena parte de este presupuesto se destinó a la rehabilitación de los jardines, respetando su distribución anterior para mantener las conexiones y los cuatro brazos en cruz que forman los caminos. Para aportar mayor luz a esta zona, se eliminaron las especies vegetales ornamentales de los parterres, dejando la arboleda original, que fue saneada y regenerada y aplicando un podado. La zona ajardinada se ensanchó un poco para integrarla en el conjunto, dado que el proyecto incluyó la peatonalización de los viales que bordean la plaza: el que conecta Edelmiro Trillo con Covadonga y la continuación de esta calle hasta Vicente Risco.

La restauración y reubicación de la fuente central completó las actuaciones, manteniéndose el mobiliario urbano existente, en concreto los bancos de piedra y forja. Estaba previsto colocar otros de madera de pinto de alta resistencia y pies de acero, pero esta última tarea aún no se ha podido realizar un año después de concluir las obras la empresa Stradia Infraestructuras. Este retraso, explica el alcalde, se debió a que las obras no estaban aún recepcionadas. "Ahora ya lo están", por lo que anuncia también la próxima colocación de los nuevos bancos, si bien evitó concretar una fecha concreta.