La vendimia en las Rías Baixas se pondrá en marcha en apenas un mes. A estas alturas puede decirse que las uvas se encuentran "en perfectas condiciones", según apuntan técnicos, bodegueros y viticultores, aunque bien es cierto que serían deseables unos días de lluvia para que pudiera hidratarse.

Lo más destacable es la ausencia de plagas o enfermedades, y dado el avanzado estado fenológico de la viña, que se encuentra en las fase de cerramiento del racimo e inicio del envero, los riesgos se reducen considerablemente.

Sea como fuere desde la Estación Fitopatológica de Areeiro (EFA), dependiente de la Diputación de Pontevedra, inciden en la necesidad de regar con frecuencia las viñas para combatir la sequía.

Se trata de evitar los daños producidos por lo que se conoce como "estrés abiótico", provocado "por la sequía y/o las temperaturas elevadas y la iluminación solar".

En relación con esto los expertos sugieren que "a pesar de que a corto o medio plazo pueden producirse precipitaciones, "es conveniente realizar riegos frecuentes en las fincas donde más se necesita", recalcan.

Al mismo tiempo aconsejan eliminar los racimos afectados por golpes de sol para evitar que en el futuro pueda desarrollarse la botritis.

En el último boletín fitosanitario emitido por la EFA se incide en todo esto y queda claro también que la situación parece a estas alturas plenamente controlada en lo que a posibles afecciones se refiere. Este es el resumen de ese informe:

| Mildiu. La presencia de nieblas y sobre todo la posible llegada de precipitaciones, que en cualquier caso serán leves, podrían propiciar la aparición de manchas de mildiu en los nuevos crecimientos de la vid, "pero con la generalización del envero los racimos ya no son sensibles al hongo", explican los técnicos. Y puntualizan: "En caso de realizar un tratamiento antimildiu se debe mojar el envés más que el haz de la hoja".

| Oidio. En este caso puede hablarse de tranquilidad total. "No hemos observado nuevos síntomas en la revisión de esta semana a nuestras parcelas de seguimiento, y además, los racimos ya no son sensibles al hongo en el envero, con lo que el riesgo se minimiza", comunicó la EFA en el boletín difundido el viernes pasado.

| Botritis. En este caso el mismo boletín dejaba constancia de que "las condiciones climáticas actuales no son favorables al hongo y, según las previsiones, se van a mantener durante los próximos días, a excepción del miércoles -por mañana-, cuando puede llover ligeramente, por lo que el riesgo de daño al racimo es muy bajo".

De cualquier modo hay que tener en cuenta que "hasta el momento de la vendimia todavía pueden suceder episodios de lluvias o de humedad durante varias horas", y en estas condiciones sí que puede aparecer el hongo.

| Polillas del racimo. En las parcelas de seguimiento que la EFA tiene distribuidas por las diferentes zonas productoras "solo hemos observado puestas muy puntualmente (algunas inviables a consecuencia de la insolación) en una de ellas y también alguna penetración aislada".

Asimismo, "las capturas de machos en las trampas han sido escasas, aunque sí han sufrido un incremento en la parcela de A Modia", en Cambados.

Parece que "en general no es necesario tratar, pero si puntualmente se observan perforaciones en un número superior al umbral de tolerancia convendrá aplicar un tratamiento".

| Ácaros. En la EFA dicen haber recibido la semana pasada "una muestra de una finca de O Salnés con una coloración bronceada que apuntaba al ataque de alguna especie de ácaro".

Ya en el laboratorio "hemos confirmado que se trataba de Calepitrimerus vitis y que la población era muy elevada".

Lo que ocurre es que "en ninguna de las otras muestras recibidas, ni en nuestras parcelas de seguimiento, se han encontrado estos animales, por lo que solo sería aconsejable tratar en aquellas fincas donde se confirme la existencia de poblaciones".

| Ácaros. En la EFA dicen haber recibido la semana pasada "una muestra de una finca de O Salnés con una coloración bronceada que apuntaba al ataque de alguna especie de ácaro".