La denuncia por homicidio imprudente se dirige al Hospital do Salnés como persona jurídica, pero también contra el equipo médico que atendió a la mujer embarazada y al bebé en sus apenas cuatro horas de vida: la pediatra y personal sanitario que participaron en la preparación del parto, en el alumbramiento, el control post-parto y la reanimación de la niña. En la denuncia penal solicitan que se identifique a todas las personas que intervinieron, entre ellas el ginecólogo, que no asistió al parto, dos matronas "y aquellas personas con directa relación con los hechos por acción u omisión". Por otra parte y como prueba, se pide la historia clínica de madre e hija con la monitorización de ambas, notas de enfermería, pruebas de diagnosis y análisis del cordón umbilical. Por último, la denuncia pide que se dé traslado de toda la documentación al médico forense para que emita un informe sobre las causas del fallecimiento del bebé y sobre el adecuado cumplimiento de los protocolos médicos por parte del hospital.