La manifestación popular más multitudinaria de Vilagarcía es desde hace un cuarto de siglo la llamada Festa da Auga que atrae a miles de personas, unas 50.000, durante las fiestas de San Roque que se conmemora el 16 de agosto.

Cuando faltan poco más de tres semanas para el desenfreno que significa esta cita ayer se presentó la imagen oficial, diseñada por el artista vilagarciano David Lages, que ya ha sido merecedor de anteriores concursos de diseño además de crear las prendas que representan a equipos como el Celta de Vigo, una cerveza artesanal y productos de las firmas Caramuxo o Reizentolo, entre otros.

El autor del dibujo, David Lages propone que la imagen para este evento se presente con un fondo azul y hace alusión a la figura de un peregrino que se propone recorrer la llamada "Zona Húmeda" de la Festa da Auga.

A través de un comunicado en el que se presenta el emblema de esta XXV Festa da Auga, Lages destaca el aprecio que le tiene a esta cita ya que incluso su padre tiene la colección completa de las camisetas de la Festa da Auga celebradas en Vilagarcía.

Las del presente año estarán a la venta al público en todas las tallas en la plaza de Galicia a partir de las 11 de la mañana del sábado 6 de agosto, además del martes 9 y el viernes, día 11, exponen en la organización.

"Mi padre tiene todas las camisas de la Fiesta desde que se comenzaron a hacer por lo que espero en que también conserve ésta pues están hechas con todo el orgullo y cariño que cualquier vilagarciano le pondría", insiste Lages

La asociación recuerda que la Festa da Auga comienza a las 12.00 horas en la capilla de San Roque al tiempo que invita a la participación de todos los vilagarcianos en la ruta que comienza en ese templo y finaliza en A Baldosa, la principal calle de terraceo de la localidad.

Los organizadores piden a los participantes que guarden respeto durante el paso de la procesión de San Roque, en los momentos previos al comienzo de la fiesta "y no tirar agua hasta después de las doce de la mañana" sin romper el cordón humano que acompaña la imagen desde la iglesia de Santa Eulalia a la capilla.

La fiesta nace el 16 de agosto de 1983 de forma espontánea pero hasta 1991 el Concello de Vilagarcía no la declara oficial, que es cuando se elige un pregonero que lanza el primer cubo de agua al público y a partir de ese momento se autoriza la apoteosis en la plaza de Galicia, euforia que luego se extiende al resto de la ciudad.

Los participantes ya vienen de una larga noche de juerga, por lo que son muchos los que se despejan a manguerazos o por los cubos de agua que caen de los lugares más insospechados.

Y es que mojar a todo el que cruce la llamada zona húmeda es la única misión que tienen los participantes en una cita que nació de forma espontánea hace más de tres décadas.

Quienes recuerdan como surgió la fiesta hablan de una tarde tórrida de mitad de agosto de 1983 cuando una pandilla de amigos decidió arrojar los primeros cubos de agua sobre unos desconocidos que cruzaban la calle de A Baldosa con la idea de refrescarles.

Lejos de enfadarse esas primeras víctimas agradecieron la ocurrencia por lo que ya ese día fue imitado por otros grupos de personas que disfrutaban de la tarde. Al año siguiente se volvió a repetir la misma escena por lo que empezó a tomar cuerpo una de las citas lúdicas que atraen a miles de personas hasta una localidad.

El pasado año, la Festa da Auga atrajo a unas 50.000 personas a Vilagarcía y no se descarta que la cifra se pueda superar en la presente edición.Lo importante va a ser mantener las formas durante una celebración en la que también se producen desmanes, que las autoridades tratarán de evitar.

*Imagen 1: Cartel de la Festa da Auga 2016*Imagen 2: Uno de los momentos apoteósicos de la Festa da Auga-2015. // I.Abella