Los dos últimos inviernos han sido malos para la flota de la vieira. Se ha pescado mucho menos que en campañas precedentes, y el marisco que se extrajo este año también es más pequeño que el que solía verse cuando llegaban a tierra los barcos del "rastro de vieira". Esta circunstancia está acarreando más de un quebradero de cabeza a Porto de Cambados, la empresa que comercializa en exclusiva la vieira de la ría de Arousa, y cuyo accionista principal es la cofradía de pescadores de la localidad.

"Hace ya un tiempo que no cogemos clientes nuevos porque entendemos que tenemos que estar al lado de aquellos que apostaron por nosotros desde el principio", afirma Mar Ambroa, que es la gerente de Porto de Cambados. Añade que en este 2016 se está notando un repunte en el consumo, y que eso redunda en la demanda de un marisco tan apreciado como la vieira. "Como ejemplo puedo decir que uno de nuestros clientes tiene 13 bodas el fin de semana que viene", prosigue.

Pero haya mucha o poca vieira, Porto de Cambados considera que ha de seguir promocionándola, de ahí que el Paseo da Calzada acoja hasta hoy la decimoquinta edición de las Xornadas de Exaltación de este producto. La fiesta, que tiene la declaración de Interese Turístico Galego, volvió a sufrir ayer la ola de calor, que mermó la asistencia de público a mediodía, y tuvo como uno de sus grandes protagonistas en su segunda jornada al cocinero Pepe Solla, que tiene una Estrella Michelín en su restaurante de Poio Casa Solla. El restaurador protagonizó a mediodía un "showcooking" en el que preparó cinco platos: cuatro de ellos con viera, y uno con "xarda" (caballa), que es uno de los pescados estrella de la flota gallega.

Solla preparó la vieira marinada, en crudo, en salteado y reogada, mientras que la "xarda" la elaboró cocinada en sal. "Cuando pensamos en cocinar pensamos en fuego, pero se puede cocinar de muchas formas sin utilizar el calor. Con la sal, por ejemplo".Sobre la vieira, declara que "la de Galicia es un producto diferencial. He probado muchas de otros países, y no tienen nada que ver con la nuestra, con su gusto y textura".