El marisco está alcanzando en las lonjas de O Salnés los mejores precios de los últimos años. En el caso de algunos tipos de almeja, incluso se trata de las mejores cotizaciones medias en lo que va de siglo. Una situación que se debe por un lado a la brusca disminución de capturas en algunas especies, lo que motiva que los compradores estén dispuestos a pagar más por lo que llega a las rulas; y por otro, a un ligero incremento en la demanda por una parte de los consumidores. Los datos de Pesca de Galicia son elocuentes.

Tomando como referencia los meses de junio -algunas cofradías aún no han colgado en la aplicación de la Xunta de Galicia los resultados de ventas de lo que va de mes de julio-, la cotización de las almejas fina y babosa se han disparado este año. En el caso de la fina, ha tenido un precio mínimo de 29 euros el kilo en la lonja de Cambados, frente a los poco más de 21 euros el kilo que tuvo en junio de 2015 o los 19,41 euros el kilo de hace dos ejercicios.

El precio medio de la almeja fina en Cambados es el más alto, como mínimo, desde 2000, y para aproximarse a las cifras de este 2016 hay que romontarse a 2004 (28,85 euros el kilo) o 2005 (27,54).

Algo similar ocurre con la almeja babosa. En la lonja de A Illa se pagó a un precio medio de 17,14 euros el pasado mes de junio, mientras que en el mismo periodo del año pasado el precio medio era cuatro euros por kilo más bajo. También en este caso, la cotización que está teniendo la babosa en A Illa en estos momentos es la más alta del siglo. Para encontrar un dato similar hay que remontarse al año 2006, con un precio medio de 16,43 euros el kilo.

La situación es ligeramente distinta en el caso de la almeja japónica, la otra más habitual en las playas de O Salnés. En este caso, y tomando como referencia las subastas de Vilanova, el precio medio del pasado junio es el quinto mejor del siglo. El máximo se obtuvo en 2002, con 14,15 euros por kilo, y en estos momentos se está pagando por ella en torno a los 9 euros. En cualquier caso, se trata también de una cifra muy superior a la de los últimos años. En 2015 el precio medio había sido de 6,56 euros el kilo; en 2014, de 5,72; y en 2013, de 4,86.

Menos cantidad

Un aspecto que influye mucho en el precio es la cantidad de marisco disponible. Y ésta está descendiendo sensiblemente. Así, en la lonja de A Illa hace prácticamente 10 años que no se veía tan poca almeja babosa como ahora. Los 6.600 kilos despachados el pasado junio se quedan en muy poco comparados con los 8.400 de 2015 o los 15.000 del año anterior. De hecho, son un tercio de las capturas de 2009 a 2011, pues en esos tres años se vendían en torno a 18.000 kilos en un solo mes.

Algo similar sucede con la almeja fina en Cambados. El mes pasado se subastaron poco más de 2.900 kilos. Hacía nueve años que no se subastaba tan poca almeja, y de hecho en los últimos ejercicios era raro que se bajase en junio de los 4.500 o 5.000 kilos.

Pero el buen momento de los mariscos en las lonjas -en cuanto a precios- no se circunscribe solamente a la almeja. También se ha disparado el precio en el caso del camarón, el percebe o la navaja. La diferencia de estos tres recursos con respecto a las almejas es que no existe un descenso brusco de capturas. Al contrario, se está pescando más.

En el caso del camarón, ronda los 50 euros el kilo en la lonja de A Illa, frente a los poco más de 38 de hace un año, y los 43 de hace dos. Hay que remontarse al mes de junio de 2006, mucho antes de la crisis, para encontrar un valor mejor que el actual. En aquel entonces superaba los 66 euros el kilo.

En lo que respecta al percebe, la de O Grove es una de las rulas principales de la ría de Arousa. En estos momentos se está pagando por él unos 35 euros el kilo. Eso significa unos cinco euros por kilo más que hace un año. Los precios aún eran inferiores en 2014 y 2013 (29,50 y 24,37 euros el kilo, respectivamente), hasta que en 2010 sí se encuentra un precio medio mejor que el actual, al situarse entonces por encima de los 42 euros el kilo.

Volviendo a la lonja de A Illa, otro recurso muy tradicional es la navaja. La cotización media actual es la mejor desde 2009. Entonces se pagó a más de 10 euros, frente a los 8,70 euros el kilo del presente ejercicio. En 2015 se había vendido a un euro menos, y en 2014, a dos euros el kilo menos. En junio pasado se comercializaron 1.300 kilos, unos 300 más que hace un año.