Las cámaras del muelle de Vilanova pueden resultar clave para determinar qué fue lo que ocurrió en la madrugada del pasado martes, cuando un sabotaje acabó con el bateeiro "Santorito" hundido cuando se encontraba amarrado a los pantalanes de la dársena. La investigación, que está siendo realizada por la Guardia Civil, tiene previsto realizar un visionado de las mismas para comprobar si pudieron capturar alguna imagen que sirva para esclarecer lo ocurrido e identificar a los responsables. Aunque esas cámaras no han resultado de mucha ayuda en otros incidentes registrados en el muelle, críticas que han vertido en más de una ocasión los marineros, los investigadores las añadirán a las pesquisas que realizan. Mientras, en el sector continúa el estupor por lo ocurrido, ya que nunca se había registrado una situación similar, al menos en Vilanova, ni siquiera en momentos de mucha tensión en el seno de los bateeiros, situaciones en las que se llegó a registrar algún corte de cuerdas, pero nunca el hundimiento de una embarcación. Además, existe una importante preocupación con lo ocurrido, ya que cualquiera de ellos puede ser víctima de un sabotaje similar. La pintada realizada en el puente ("Skirol") y el corte de los manguitos de los grifos de fondo apuntan a una venganza en el interior del propio sector, aunque están por determinar cuales fueron los motivos.

La embarcación fue trasladada a un astillero de la zona norte para tratar de reparar todos los daños que provocó la inundación, en especial en los aparatos electrónicos y en los motores. El coste de esa reparación puede ser sumamente elevado, lo que supondrá un serio revés económico para la familia que posee el "Santorito".