El 91% de las ventas efectuadas en lo que va de año en las lonjas gallegas corresponde a los peces (72 millones de kilogramos), mientras que lo ingresado por esta familia representa el 80% de la facturación total, con casi 162 millones de euros.
En este caso se aprecia la tendencia generalizada en las operaciones de primera venta, en el sentido de que se ha reducido ligeramente el volumen respecto al mismo periodo del año anterior, cuando se subastaron casi 82 millones de kilogramos, pero aún así ha aumentado la recaudación, ya que hace un año se habían facturado casi dos millones de euros menos.
La otra familia importante en Galicia es la de los bivalvos, que en cualquier caso atraviesan su mejor momento en la segunda mitad de cada ejercicio. En lo que va del primer semestre se vendieron más de dos millones de kilos por valor de 20 millones de euros, lo que representa prácticamente la misma cantidad de producto que el año anterior, pero con una recaudación de tres millones de euros más.
Los que han experimentado un tirón significativo, aprovechando sobre todo las campañas del centollo y el percebe, han sido los crustáceos, que a día de ayer ofrecían un balance económico de 5,3 millones de euros tras la venta de 321 toneladas, frente a los 4,4 millones de euros y 251 toneladas del año pasado.
Por último, que no menos importante, cabe aludir a los cefalópodos, pues han arrojado en las lonjas gallegas unos resultados muy positivos, con casi 2.900 toneladas y cerca de 13 millones de euros, frente a las 3.000 toneladas y 9,5 millones de euros del ejercicio anterior.
En lo que va de año destacan los 7 millones de euros obtenidos con el pulpo, 3 millones por el choco, otros tantos por el percebe, más de 15 millones por la almeja, 8 por el lirio, 60 por la merluza, 20 por el rape y 15 millones de euros por los rapantes.
