La Diputación de Pontevedra se ha propuesto replantear por completo el modelo de la Ruta do Viño Rías Baixas, sobre todo, después de conocer los datos que revelan el "absoluto fracaso" del convenio que firmó la anterior ejecutiva provincial con la asociación que la gestiona y que supuso un "importante" gasto público sin reversión ni económica, ni de consolidación de la ruta.

Ha sido el propio colectivo de las bodegas, hoteles y restaurantes el que expresó sus quejas al actual gobierno de la Diputación de que se financien con dinero público acciones que no provocaron, prácticamente, ningún retorno para el sector, que "no pusieron en valor la marca de la Ruta y que, en todo caso, tampoco ha mejorado el tejido socioeconómico de las comarcas en las que está implementada".

Los bodegueros coinciden en la necesidad de replantear el proyecto ante la falta de organización, acciones con escaso resultado de visitas, bodegas cerradas que deberían ser visitadas, actividades dirigidas a grupos de personas de la propia asociación que gestiona la Ruta o el escaso apoyo de entidades locales.

Ante lo que considera un "auténtico despropósito" del anterior gobierno, la Diputación va a exponer una auditoría interna de la Ruta do Viño Rías Baixas para establecer un plan de mejora que permita situarla en el mapa, garantice un retorno efectivo a las bodegas, fije el apoyo a los pequeños cosechadores, busque una mayor implicación de las empresas y de los ayuntamientos que son socios de la misma, evalúe el servicio prestado, cree un inventario de recursos y permita redactar un plan de calidad.

La institución provincial coincide con el sector en la necesidad de realizar una completa reformulación de un proyecto por el que apuesta, pero que cuestiona en como se ha llevado hasta el momento por la ausencia de resultados positivos, muy "ínfimos" para el esfuerzo inversor realizado.