El Partido Galeguista Demócrata (PGD) de O Grove, representado en la Corporación por el edil Alfredo Bea García, presentó en el Registro Municipal un escrito dirigido al alcalde y al secretario en el que pide que se paralice el expediente de contratación de la cafetería que funcionará en el recinto de la Festa do Marisco en caso de que el beneficiario del proceso abierto sea el mismo que se hizo con esta concesión el año pasado.

Hay que recordar que aquel concurso fue ganado por el número 9 de la lista del PSOE en las pasadas elecciones, Francisco Manuel Álvarez Sanmartín (Pacucho), lo cual fue duramente criticado por los galeguistas.

Pero las mayores quejas se produjeron durante la propia fiesta, cuando Alfredo Bea dijo haber detectado "diversas irregularidades" que suponían el presunto incumplimiento de las bases de adjudicación.

Es por ello que el concejal de la oposición pidió que se abriera un expediente sancionador contra el concesionario de la cafetería de la fiesta. Y lo que reclama ahora Alfredo Bea en el escrito antes citado es que se le dé cuenta del estado de este expediente y, en caso de que no exista, exige que se abra inmediatamente.

Sin perjuicio de emprender otro tipo de acciones, Bea insiste en que los sucedido resulta "extremadamente grave", pues "para nada se cumplieron los criterios marcados en el concurso de adjudicación de la cafetería".

Lo que sucedió, según ahora recuerda en el escrito entregado por Registro, es que "existió incumplimiento en los horarios de funcionamiento y atención al público". Además "no se instaló la decoración supuestamente marinera" que prometió el beneficiario durante el concurso, ya que ese decorado "se quedó en unos simples palés de madera". Por si fuera poco, "permitió fumar en el recinto con menores de edad presentes".

Es por ello que Alfredo Bea recuerda al alcalde y al secretario del Concello que "la Administración está obligada a supervisar si se cumplen los criterios por los que se efectúa la adjudicación de un servicio", en este caso la cafetería de la Festa do Marisco de 2015.

Pruebas fotográficas

Para tratar de aclarar todo esto y que se sancione al anterior concesionario, el PGD aporta "pruebas" que demostrarían que la citada cafetería "estuvo abierta los fines de semana hasta las seis de la madrugada", lo cual incluso habría hecho necesaria la presencia de la Guardia Civil.

Las fotos aportadas por los galeguistas también tratan de dejar claro que la decoración del local no tenía nada que ver con la que ofertó el beneficiario cuando consiguió ganar el concurso de adjudicación.

Desde septiembre de 2015

Toda esta polémica comenzaba en septiembre de 2015, incluso antes de que diera comienzo la pasada Festa do Marisco, cuando Bea denunció el "copago socialista" y "los cambalaches que está montando el nuevo gobierno en torno a la fiesta".

Censuraba entonces la adjudicación del servicio de cafetería a Francisco Álvarez (Pacucho), al que definió como "un alto cargo del PSOE local" que estaría siendo beneficiado por su partido en el gobierno.

"Contratos a dedo"

Bea hablaba ya de "contratos a dedo o concursos teledirigidos para beneficiar a los suyos" por parte del PSOE, y en plena celebración de la fiesta advertía de que "son muchas las explicaciones que debe ofrecer el gobierno sobre el papel que desempeña este hombre, ya que además de beneficiarse del concurso da órdenes a los operarios y se encarga de otras labores organizativas".

Una vez superado el evento gastronómico se supo que Francisco Manuel Álvarez Sanmartín habría cobrado 9.000 euros por los servicios prestados durante el mismo.

En el Consello Local de Turismo, y a instancias del propio Alfredo Bea, se desmenuzaban las facturas y se comprobaba que, "Pacucho había sido claramente beneficiado por sus amigos en el gobierno".

El beneficiario de la concesión había ofertado al Concello 6.000 euros para hacerse con la cafetería, comprometiéndose además a decorarla con motivos marineros.

Las cuentas

"Pero la decoración marinera prometida se limitó a cuatro palés de madera y los 6.000 euros que ingresó en las arcas municipales se quedaron realmente en 2.500, ya que el Concello tuvo que gastar 3.500 euros en montarle la carpa para esa cafetería, que era algo que en las anteriores ediciones pagaba directamente el ganador del concurso, espetaba Alfredo Bea en enero de 2016.

Esto lo llevada a decir que "a 'Pacucho' le salió tirada la cafetería, sobre todo porque sabía que iba a cobrar 9.000 euros por otros conceptos", pues "cobró 2.783 euros por el diseño y realización de ocho stands para la carpa de pinchos de la Festa do Marisco, además de 1.633 euros por el concepto de 'organización y dirección de la exposición de A Toxa', y otros 1.633 euros por 'organización de la exposición sobre el Gran Hotel La Toja', a pesar de que el traslado de todo el material y su montaje corrió a cargo de los operarios municipales".