Un importante despliegue de medios se realizó a mediodía de ayer en el centro de Vilagarcía como consecuencia del traslado urgente de un paciente en estado muy grave al hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo. El hombre fue atendido en urgencias del centro hospitalario comarcal, pero era necesaria su evacuación en helicóptero, lo que volvió a poner en evidencia, una vez más, la falta de helipuerto en las inmediaciones del centro sanitario.

Cuando se construyó el Hospital Comarcal do Salnés se marcó un área para helipuerto frente a la fachada de urgencias, pero ningún helicóptero pudo utilizarlo nunca debido a que la zona está atravesada por una línea eléctrica de media tensión que impide el aterrizaje de forma segura.

Desde entonces, todos los traslados sanitarios de emergencias han tenido como escenario la explanada del área lúdica de la TIR del Puerto de Vilagarcía, lo que implica que una ambulancia medicalizada atraviese todo el casco urbano vilagarciano para llegar a este punto y realizar el trasvase del paciente al helicóptero. Se desconoce si se han hecho gestiones para que la empresa eléctrica proceda a desviar esta línea y esta actuación es posible. Lo que sí debería plantearse es la disponibilidad de un helipuerto mucho más próximo al Hospital Comarcal do Salnés para garantizar que el traslado de los pacientes muy graves. El alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, se mostró dispuesto a ceder terrenos en el polígono industrial de Baión, a menos de dos minutos del hospital, poniendo a disposición de la Xunta tanto una zona asfaltada como otra de hierba, ambas diáfanas, en las que ningún tipo de cable impide tomar tierra a helicópteros.

Mientras trato, en la zona TIR vilagarciana seguirán repitiéndose escenas como la de ayer a mediodía, cuando un simple traslado obligó a movilizar a buena parte de los efectivos de emergencias de la ciudad. La Policía Local, miembros de Protección Civil con dos vehículos de emergencias y una ambulancia y, por momentos, incluso la Policía Portuaria esperaban la llegada del un helicóptero de Urxencias Sanitarias del 061 y vigilaban que nadie atravesara la zona reservada para el aterrizaje. El operativo apenas duró un cuarto de hora, lo que tardó en llegar a la explanada TIR la UVI móvil con el paciente, un hombre con una afección coronaria, y el tiempo que emplearon los facultativos para hacer una primera valoración del paciente. Y todo ante los móviles y la mirada de decenas de curiosos que creían, en muchos casos, que se trataba de un simulacro.

Protección Civil explicaba aún en el lugar que la zona TIR es la que mejor conexión ofrece al hospital, ya que desde la rotonda de Pablo Picasso las ambulancias ya pueden enlazar directamente con la carretera N-640.