El reló fue, durante años, un complemento económico muy importante para los mariscadores, pero su veda por causa de la aparición de plomo se convirtió en un serio golpe que todavía continúan pagando, ya que la reapertura con limitaciones no ha servido para recuperar el mercado que se perdió. Los patrones mayores de la ría llevan tiempo reclamando a la Consellería do Mar que realice estudios adecuados sobre los riesgos que puede suponer el consumo de plomo para los humanos, exigiendo que se continúe con el estudio de la Universidad de Vigo.

Sin embargo, Salgado expuso ayer que "ni el Intecmar, ni otro centro de investigación dependiente de Mar pueden asumir las siguientes fases que se requieren para experimentar con la incidencia del reló afectado por plomo en mamíferos, pero sí estamos dispuestos a colaborar en su elaboración".