El PP de Meaño pagará la multa por enviar la monitora sin contrato a un campamento

Así lo confirmó la alcaldesa de Meaño, Lourdes Ucha, en el pleno celebrado en la noche del lunes, a requerimiento del portavoz de Meaño Independente, José Manuel Aspérez quien demandó que fuera la propia regidora la que asumiera de forma personal el pago de dicha sanción por el error cometido.

A ello la propia Lourdes Ucha replicó: "La sanción se va a pagar, pero al concello no va a costarle un euro, porque será el grupo de gobierno el que la asuma por cuenta propia".

El tema había aflorado el pasado verano -Aspérez Montes lo sacó a luz en una sesión plenaria- en el que una monitora de tiempo libre, que había finalizado su situación contractual con el concello con fecha de 22 de junio e iba a retomarla el 1 de julio, acudió en ese impase de ocho días a desempeñar su labor profesional en el citado campamento musical.

Una inspección de Trabajo, que la alcaldesa calificó en su día como "rutinaria" al colegio San Narciso, donde se estaba desarrollando el campamento, reparó con la situación irregular de la trabajadora en cuestión por lo que se inició la apertura de un expediente sancionador que, tras los plazos de alegaciones y pasado el tiempo, acaba de cerrarse con la referida sanción económmica.

Lourdes Ucha lo justificó en su día diciendo que la trabajadora "había solicitado ir al campamento voluntariamente, y nuestro error fue permitirlo".

Fiesta de San Cristóbal

Fue uno de los asuntos candentes de una sesión plenaria, esta del lunes que, pese a lo exíguo de la orden del día, se prolongó durante más de dos horas y donde en todo momento planeó la polémica de la negativa del concello a autorizar la celebración de la fiesta de San Cristóbal en Os Pasales.

Incluso se vivió algún momento de tensión con comentarios en voz alta del público interrumpiendo la sesión cuando se debatió el asunto en varios momentos dentro del capítulo de ruego y preguntas.

La socialista Icía García habló de "situación crítica" la generada en Dena, de "líneas rojas e imposiciones" por parte del grupo de gobierno y pidió a la regidora que "aparque su orgullo para llegar a un entendimiento".

Por su parte Meaño Independente sorprendió intentando presentar por vía de urgencia una moción que planteaba fueran representantes de los tres grupos políticos los que se reunieran con la comisión para buscar una entente que posibilitara la celebración de las fiestas.

Intento fallido. La moción no fue admitida a trámite al rechazar el PP en su mayoría el carácter de urgencia que debía primar en estos casos.

Aspérez Montes criticó entonces la interpretación que de las cláusulas de Costas hacía el grupo de gobierno que, según el portavoz de MI, en la primera del capítulo segundo se advierte que el espacio cedido en Os Pasales "será público y gratuito, y en esa zona ustedes han habilitado una pista de pádel cuyo uso no es gratuito".

"No es normal -agregó- que se esgrima la normativa de Costas al pie de la letra para la fiesta de Os Pasales, pero no en el uso privado de la pista de pádel", una paradoja que quedó plasmada en el acta.

Amenazas

La alcaldesa Lourdes Ucha aseguró estar dispuesta a negociar con la comisión "y a reunirme cuantas veces haga falta con sus representantes, pero no para aceptar imposiciones ni mucho menos amenazas", que denunció haber sufrido estos días en el fragor de toda esta polémica.

El concejal de la agrupación Meaño Independente, Pepe Varela -que incluso dirigió un gesto al público presente en la sala pidiéndole mesura-, lamentó la situación creada y desveló que "a inicios de mayo me reuní personalmente contigo -en relación a la alcaldesa- para ponerte en antecedentes de lo que se estaba cociendo en la paroquia de Dena con la fiesta de San Cristóbal, e incluso en aquella ocasión me ofrecí personalmente para mediar e ir con vosotros a una reunión con la comisión con el objeto de buscar un acuerdo y que el asunto no estallara".

Un Varela Budelo que planteó a la alcaldesa "voluntad política, porque hay partes en que la comisión de fiestas yo sé que van a ceder".

Negociaciones

Y, aprovechando la circunstancia, le demandó a la regidora "actitud para hacer frente a los problemas y, si una situación lo requiere, dar marcha atrás y pedir perdón, porque ese es un gesto que ennoblece".

Y en una interpelación posterior le cuestionó su capacidad negociadora a la hora de la ocupación de terrenos para ampliación de caminos: "hay que hablar con los vecinos antes de poner las estacas -le advirtió-, porque después al propietario de la finca le parece mal y ya no cede por pura y simple cabezonería".