El traslado del servicio de Urgencias al nuevo edificio del Hospital Comarcal do Salnés se materializará en unos días. Este es el compromiso que desde la dirección se ha comunicado a los representantes de los trabajadores. Oficialmente no hay una fecha determinada para este cambio, aunque sí es inminente porque el personal del servicio ha sido invitado a conocer las nuevas instalaciones para familiarizarse con los nuevos espacios en una visita prevista para hoy.
Los delegados sindicales esperan que pueda materializarse el traslado esta misma semana, o como máximo en diez días, ya que en estos momentos Urgencias trabaja a un ritmo normal, con un centenar de asistencias diarias, y lo bueno es que la plantilla ya esté familiarizada con los nuevos espacios y equipos cuando se produzca el pico asistencial durante la temporada estival.
La construcción del nuevo edificio, ubicado en un lateral del centro hospitalario comarcal, está acabada desde el mes de marzo, fecha en la que comenzaron los trámites para la recepción de las instalaciones, la verificación técnica y la posterior instalación de los equipamientos. Estos materiales ya han llegado en los últimos días al centro hospitalario comarcal.
El último trámite, antes de hacer efectivo el traslado de los servicios de urgencias y obstetricia, es la superación de los controles biológicos obligatorios para obtener plenas garantías sanitarias.
Las previsiones de la Consellería de Sanidade, expresadas por su titular Vázquez Almuíña en una visita a Pontevedra, eran poder formalizar el traslado de urgencias y obstetricia al nuevo edificio del Hospital do Salnés a mediados de mayo. Los menos optimistas apostaron por materializar el cambio antes del inicio del verano y, a tenor de las informaciones que recibieron los representantes de los trabajadores, éste será inminente.
El edificio anexo cuenta con un acceso propio por el lateral del centro hospitalario, con una explanada exterior cubierta suficientemente amplia para que las ambulancias y los vehículos puedan dejar a los pacientes frente a urgencias protegidos de las inclemencias meteorológicas. Ya en la entrada, el nuevo edificio cuenta con una amplia recepción que deriva las urgencias de pediatría a un bloque diferenciado de las generales.
El área de urgencias pediátricas cuenta con triaje propio, dos consultas, una sala de observación con dos camas, y una sala de espera propia. Al otro lado de la recepción está el bloque para las urgencias generales con dos boxes especiales y amplios para la atención de urgencias vitales (uno más que el existente en el actual servicio). Hay zona de triaje, amplia sala de espera y diez boxes de buen tamaño que triplican la superficie de los disponibles en el actual servicio. Además, como novedad, hay dos salas preparadas para pacientes que necesiten aislamiento.
También hay una sala para los pacientes atendidos que están recibiendo tratamiento o que se encuentran a la espera del resultado de las pruebas practicadas.
El nuevo servicio de Urgencias cuenta con dos controles de enfermería; uno para la zona general y otro para el sector de las camas de observación. También hay dos habitaciones para pacientes en observación que necesiten estar aislados, consultas, sala de yesos y sala de médicos. La superficie total de las nuevas instalaciones triplica el actual servicio.
Pero de lo que aún no se ha hablado con la junta de personal es de la plantilla necesaria para desarrollar el trabajo en las nuevas instalaciones. Por este motivo, los representantes sindicales no creen que pueda comenzar el triaje diferenciado de pediatría en urgencias.
En el mismo edificio se ubica el área de Obstetricia que pasa de 130 a 500 metros cuadrados. Cuenta con dos salas polivalentes de dos camas cada una, y dos salas de parto con sus respectivas bañeras para las mujeres que quieran dar a luz en un medio acuático. También se instala una sala de reanimación de bebés con dos cunas.
