El Ayuntamiento de Cambados aprueba en su sesión plenaria de esta noche su adhesión al convenio firmado hace un mes por el Instituto Galego da Vivenda e o Solo (IGVS) y la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) para la puesta a disposición de desahuciados y familias en riesgo de exclusión social de viviendas vacías. El cambadés será así uno de los primeros ayuntamientos gallegos en adherirse a este plan, que ya fue aprobado en Lalín y Ourense, por citar dos ejemplos.

Tras la aprobación en pleno de la adhesión al plan se creará una comisión bilateral entre el IGVS -un departamento dependiente de la Xunta de Galicia- y cada ayuntamiento, y será en esa comisión en la que se concreten las características que han de tener las viviendas que se ofrezcan en alquiler. Será después cuando se inicie el trabajo de confección del censo mediante la inscripción forzosa o voluntaria de las viviendas, y el Concello afronte el trabajo de captación de las mismas. Estas se ofrecerán en alquiler, a un precio mensual que oscilará por término medio entre los 300 y los 400 euros, según el tamaño del municipio en el que se encuentre el inmueble.

Reunirse con los bancos

El concejal de Asuntos Sociais de Cambados, Constantino Cordal, afirma que agilizaron lo máximo posible la adhesión al convenio de Vivenda y la Fegamp, "porque sigue habiendo muchas personas que están pasando por serias dificultades económicas". De hecho, anuncia que el Concello aprovechará la puesta en marcha de este programa para reunirse con los bancos, "para establecer un protocolo de actuación que evite tener que llegar a los desahucios".

Así las cosas, el concello cambadés abre el camino en la comarca para este programa con el que la Xunta de Galicia pretende minimizar las cifras de familias en riesgo de pobreza extrema y sin techo. La adhesión al plan será forzosa para los pisos o casas pertenecientes a las entidades bancarias y situados en las poblaciones de más de 10.000 habitantes -como es el caso en O Salnés de Vilagarcía, Sanxenxo, Cambados, O Grove y Vilanova- y voluntario para todos los demás propietarios.

Los que se den de alta en el censo podrán beneficiarse de la intermediación de Vivenda para la venta o alquiler de sus propiedades, y dispondrán de un seguro para cubrir eventuales daños en la vivienda o impagos de los inquilinos.

El camino de Cambados presumiblemente lo seguirán en las próximas semanas otras localidades arousanas. En Vilagarcía y Ribadumia, por citar solo dos ejemplos, explicaron ayer que su intención es participar del convenio, si bien por el momento todavía sus técnicos están elaborando los informes pertinentes.

Además, los técnicos municipales de servicios sociales de la provincia participaron ayer en una reunión celebrada en la Delegación territorial de la Xunta de Galicia en Pontevedra, en la que los responsables autonómicos les explicaron en detalle precisamente este plan, así como otras propuestas de la Xunta para luchar contra los desahucios y la exclusión social.

Los bancos tienen un gran protagonismo en el buen desarrollo de este convenio, pues cuentan todavía con un gran número de viviendas paradas en su cartera de activos. Sin ir más lejos, la Sociedad para la gestión de activos procedentes de la reestructuración bancaria (Sareb) o "banco malo" todavía cuenta con más de un centenar de viviendas pendientes de vender en O Salnés. Entre estas hay desde pisos en el centro de Vilagarcía que pueden adquirirse por apenas 50.000 euros hasta lujosos chalés en Sanxenxo u O Grove que cuestan medio millón de euros.

El portavoz del cuatripartito de Cambados, Xurxo Charlín, plantea que esta ley autonómica permitirá movilizar la gran cartera residencial con la que se hicieron los bancos tanto de propietarios como de promotores o pequeños inversores. "En Cambados hay bancos que tienen edificios casi enteros", espetó el edil.