El Partido Popular califica como "una jungla" al parque Miguel Hernández, lamentando su actual estado de "suciedad y abandono, con serio riesgo para niños y mayores". El portavoz del PP, Tomás Fole, afirma que "hemos recibido múltiples quejas de usuarios por el deterioro de diversos elementos del parque", centrándose muchas de estas protestas en "el número creciente de baldosas rotas en el paseo y que exponen a los usuarios a continuos peligros. Incluso ha habido caídas", asegura Fole, que critica igualmente que "se ha talado un árbol y arrancado otro sin que el gobierno local haya explicado las razones". Otros ejemplares arbóreos "han levantado el pavimento, por no hablar de las farolas que faltan".

Para el PP, el "olvido caprichoso" de este parque por parte del Concello se ejemplifica con "la maleza existente y con la vegetación de la pérgola" que separa las dos grandes áreas de juegos infantiles. Otros desperfectos a los que alude Fole son "un banco que lleva meses sin respaldo" y "un agujero en los peldaños del elemento central del parque en el que los niños tiene que aprender a subir escaleras esquivando el hueco".

Tomás Fole no entiende cómo el gobierno no acometió medidas de mejora en la zona antes de las fiestas de Santa Rita, durante las que, según dice, se han detectado "prácticas de dudosa legalidad" en el entorno de este parque. "Se han violado las normas de higiene, se han utilizado elementos urbanos para asegurar puestos y se han dejado tomas de corriente al alcalde de niños y usuarios. Es un compendio de despropósitos que podrían haber causado accidentes", concluye el PP.