El Concello de Meaño amplía su campaña de compostaje doméstico con la oferta de 33 nuevos composteros que se pondrán a disposición de los vecinos de forma gratuita durante esta semana. Dada la excelente acogida de la primera fase del proyecto, que se inició el pasado verano y en la que se dispensaron 50 depósitos que funcionan hoy a pleno rendimiento en otros tantos domicilios del municipio, el gobierno local ha decidido dar un paso más y ampliar el proyecto.

Los interesados en hacerse con uno de los 33 composteros que se ofertan pueden solicitarlo a partir de hoy lunes en las oficinas del Concello, bien de forma presencial o a través del teléfono. Para ello es preciso que los demandantes estén empadronados en el municipio de Meaño y dispongan de una huerta o jardín.

Acogerse al programa conlleva además el compromiso de aceptar el seguimiento técnico en los domicilios durante seis meses para comprobar el uso correcto del depósito a fin de que funcionen a pleno rendimiento y se le quite el máximo partido. El plazo de solicitud finaliza el 3 de junio y se recuerda que los composteros se asignarán por orden de petición.

Meaño inició este plan -tras ser demandado en su día de forma reiterada por el otrora edil nacionalista Rodrigo Pazos- en agosto de 2015, en que comenzó ofertando 25 composteros dispensados por Sogama y, ante la alta demanda, ofreció 25 más. Desde el Concello apuntan que los beneficios económicos y medioambientales no ofrecen duda. Con esos 50 composteros funcionado, y los 33 que se añaden ahora, se estima que, dado que que un hogar compuesto por una media de 2,5 personas produce en torno a 268 kilos de basura orgánica al año, se evitaría depositar en los contenedores verdes un total de 22.244 kilos al año.

Teniendo en cuenta que Sogama cobra actualmente a los concellos un canon de 73,90 euros (IVA incluido) por tonelada procesada, ello se traduciría en un ahorro objetivo de 1.640 euros al año a las arcas municipales.

Coste medioambiental

A ello cabe añadir el coste medioambiental. Y es que esas 22,2 toneladas de basura que irían destinadas a compostaje supondrían el evitar el envío directo a la atmósfera 3,9 toneladas de gases de efecto invernadero al año.

Esa cantidad sería aún mayor si se contabilizasen las emisiones indirectas que supondría tratar esas 22,2 toneladas de basura, por transporte a la planta de tratamiento de Sogama o por el ahorro de fertilizando químicos que se obtendría al utilizar el compost para el abono de las fincas. El de Cambados es otro concello que ha apostado recientemente por el reparto de composteros individuales, tras entregar una quincena de depósitos a finales del pasado año. También está pendiente la instalación de los de la Diputación.