Encaminada a mejorar la comprensión pública sobre las necesidades de los peces migratorios, la celebración del Día Mundial de estas especies permitió a los visitantes conocer por dentro las instalaciones de la Estación de Hidrobiología Encoro do Con y el material de toma de muestras y laboratorio con el que trabajan. "Se estudia el pez sin matarlo. Se captura, lo marcamos y se vuelve a soltar para hacerle un seguimiento en los ríos", explica Rufino Vieira. Pueden incluso volver a recapturarlo para analizar los cambios experimentados. Habitualmente se mide y pesa el ejemplar, se le quita una escama para conocer su edad e incluso se puede tomar una muestra de sangre para analizar su ADN. La exposición de materiales de ayer incluía una red de trasmallo, aparatos de pesca eléctrica, diversos tipos de marcas para colocar en los peces y sus respectivos lectores. Las marcas de telemetría las utilizaron los expertos de la estación Encoro do Con para hacer un seguimiento a las lampreas. Soltaron los ejemplares en el Ulla en Padrón y estudiaron cuánto tardaban en remontar el río. Este mismo sistema se utiliza con las alosas.

Las actividades del Día Mundial de la Migración de Peces incluyeron una exposición de paneles sobre las especies más amenazadas de Galicia. Utilizando cubetas de gran longitud, se reprodujeron un río con obstáculos y otro que permitía la libre circulación de los peces. El investigador de la Universidad de Santiago y de la Estación de Hidrobiología vilagarciana David José Nachón García impartió una charla divulgativa sobre biología, ecología y el estado de conservación de las poblaciones de peces migradores en Galicia. Nachón está, precisamente, haciendo su tesis doctoral sobre una especie migradora, la alosa, centrando su estudio en los ríos Ulla, Umia y Miño. Las actividades en la Estación de Hidrobiología se prolongaron hasta mediodía.