Decenas de juguetes, material escolar de lo más diverso y ricas gominolas saldrán de Rubiáns a comienzos de la próxima semana con destino a un campo de refugiados sirios. Fueron donados por particulares y empresas a la ANPA Casanova, que puso en marcha esta campaña solidaria en colaboración con la asociación O Souto, el colegio de Rubiáns y la ONG Alhambra Internacional. La iniciativa fue todo un éxito, dejando claro que los vilagarcianos son los primeros en colaborar con aquellos que más lo necesitan y que están viviendo situaciones verdaderamente dramáticas, como las personas que huyeron de la guerra en Siria en busca de una vida mejor que, en la mayoría de casos, no llegaron a encontrar. "Los niños necesitan jugar y evadirse de su día a día" en el campo de refugiados y ese fue el motivo por el que la ANPA decidió recolectar juguetes y chucherías, explica la presidenta Loli Lago. Fue la asociación de vecinos "la que nos puso en contacto con Alhambra Internacional, que ya hizo antes otras campañas de recogida de productos de higiene, ropa o comida, llevándolos en sus propias furgonetas hasta los campos de refugiados", continúa.

El resultado, inmejorable y con implicación tanto de familias de Rubiáns como de empresas vilagarcianas. Eran decenas los juguetes que se acumulaban ayer, último día de recogida, en el colegio. "Aunque pedíamos artículos que la gente tuviera en sus casas y a los que no les dieran uso", lo cierto es que la implicación fue más allá y "conseguimos cosas muy buenas como puzzles grandes, muñecos a estrenar, un patinete, varias pelotas, multitud de figuritas de Dora la Exploradora, Bob Esponja" y otros personajes infantiles, peluches... El material escolar era otra de las demandas y también encontró respuesta entre el vecindario, que donó "muchas pinturas, libretas o cuadernos de dibujos". "Estamos muy contentos", confirma Loli Lago. La ANPA consiguió implicar incluso a empresas y negocios locales. La juguetería Din&Don realizó un aportación, al igual que la tienda La Metro, que participó en la campaña donando una caja de regalices, y la Librería Nobel que hará su aportación en los próximos días. La remesa se completa con 144 globos con los que la ANPA representa a los 144 niños del centro educativo de Rubiáns, que estos días miraban asombrados como crecía y crecía la cantidad de juguetes. "Son para los niños de un país que se llama Siria, porque se quedaron sin casa y no tienen con que jugar", comentaban con sus compañeros algunos de los pequeños. Otros querían su parte y preguntaban: "¿Son para nosotros?". El lunes por la mañana se embalarán y pesarán y se trasladarán los paquetes al local de O Souto, donde serán recogidos por integrantes de la ONG para poner rumbo al campo de refugiados.