Tras una década asentado en Vilagarcía, Hayner Rodrigues se ha convertido en uno de los tatuadores más reconocidos de Europa. Sus victorias en certámenes en Oporto, Lisboa o Frankfurt así lo acredita. A su estudio llegan incluso clientes extranjeros a grabar en su piel.

- ¿Cómo empezó su relación con el mundo del tatuaje?

- Desde niño. Con mi madre aprendí a dibujar y desde pequeño se me dio bien. Llegué a España y empecé con los tatuajes, pero ya en Brasil trabajé con el piercing. Empecé en O Carballiño y luego me vine a Vilagarcía. Hace diez años que tatúo aquí.

- Ser un buen dibujante debe ser una de las primeras cualidades de un tatuador.

- Hoy en día ya no. Mucha gente hace la plantilla y la copia directamente. Hay mucha gente que no sabe dibujar, pero la base de un buen tatuaje debe ser el dibujo.

- ¿Qué es lo que se le debe exigir a un buen tatuador?

- Ser un buen artista y profesional en su trabajo. Es un trabajo muy bonito y no es un trabajo como todos. Siempre tienes que estar a la última para poder evolucionar. Es un proceso largo y nada fácil para ganarte un prestigio.

- ¿Hay mucha evolución en el mundo de las tintas y los cuerpos?

- Muchísima. En los últimos diez años hubo una evolución enorme. Ahora se hacen piezas de híperrealismo maravillosas. Además el mundo del tatuaje gana adeptos cada día y la exigencia te obliga a evolucionar.

- ¿Cuál es la tendencia que a usted le gusta más trabajar?

- El realismo, ya sean rostros, animales o paisajes.

- ¿Hay mucho de moda en los tatuajes?

- Sí, es como en todo. Pero también hay mucha gente a la que le sigue gustando la vieja escuela. Las tendencias van cambiado. Tribal, oriental.. Hay muchos estilos porque hay público para todos. Yo creo que un tatuador bueno es aquel que se enfoca en un estilo. Mi especialidad es el realismo. Tengo mi público y hay mucha gente que viene de fuera a tatuarse a mi estudio. Gente de Londres, Alemania o Suiza incluso. Acabo de llegar ayer de Roma de una convención y también tengo que ir a Brasil, Italia. El mundo del tatuaje es enorme y si quieres ser de los mejores tienes que estar al día. Se aprende mucho si te mueves en el máximo nivel posible.

- Antes un tatuaje casi significaba la confirmación de una vida poco recomendable, pero ese prejuicio ha cambiado absolutamente.

- Por completo. Ahora el tatuaje es una forma de mostrar un estatus. Un día conmigo son 1.000 euros porque cobro 100 euros la hora de trabajo. El que quiere un buen trabajo tiene que pagarlo. Hay mucha gente que ahorra para hacer un tatuaje. La gente antes presumía comprando unas buenas zapatillas y ahora hay mucha gente que colecciona tatuajes. Mis dibujos no son simples. Yo no soy tatuador de modas. Me gusta que me dejen fluir mis ideas. El cliente me dice lo que quiere y yo realizo mi trabajo. Me centro en obras más exclusivas.

- ¿Cuáles son los que están ahora más en boga?

- Los rostros son tendencia. Todo lo que entra dentro del realismo. Están súper de moda. En una convención de estas te das cuenta. También los superhéroes, por ejemplo, están de moda. Los mandalas de cultura hindú también los piden mucho las chicas. Las modas las marcan los famosos en casi todos los casos. Cuando Beckham se tatuó todo el brazo aquello fue una locura.

- ¿Todavía se acuerda de su primer tatoo?

- El primer tatuaje que hice fue un duende. Nunca me olvidaré.

- Parece que los tatoos son algo adictivo.

- Mucho. Hay gente que se mueve por el mundo entero para poder tatuarse con los mejores. Son coleccionistas y algunos pagan muchísimo dinero. Hay muchos famosos que se gastan mucho dinero en su piel.

- ¿La primera pregunta que se hacen los que quieren dibujar en su cuerpo es si duele mucho?

- Todos lo preguntan, pero el dolor es como todo. No es una profundidad importante como para que haga daño, pero sí molesta. No es nada insoportable. La gente antes tenía más miedo. Si tienes un problema de salud y tienes que operarte te pones nervioso, pero si vas por una cuestión estética la predisposición es otra. La ilusión de la gente es tan grande que el dolor es lo de menos. Y para mí es muy importante ver una sonrisa en la cara al acabar tu trabajo. Esa es la mejor prueba de que se sufre con motivo.

- ¿Ha tenido algún caso de alguien que se haya arrepentido de pasar por la máquina de tatuar?

- Mucha gente. En el tatuaje tienes que tener claro lo que quieres. Por eso no me gusta hacer tatuajes de moda. Pero también trabajamos con eliminación por láser. También hay mucha gente que renueva los dibujos.

- ¿Y el tatuaje más embarazoso que le ha tocado realizar?

- Si todo lo hace con paciencia no hay nada complicado. Siempre tienes que tener más paciencia en función de la zona que toca.