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Leticia Aguín: "Lo primero que piensas es me mato, me sucicido"

Madre de dos menores, lucha por que le condonen la deuda de su piso y se le asigne un alquiler social

Leticia Aguín, afectada por la hipoteca. // Rafa Vázquez

Leticia Aguín es madre de dos niños y sus recursos son muy limitados. Actualmente, sus ingresos ascienden a 590 euros. Compró una vivienda de protección oficial, para lo cual necesitó dos préstamos, uno hipotecario por el 80 por ciento del valor de la vivienda (más de 73.000 euros) y uno puente para cubrir el 20 por ciento restante (36.000 euros). El hipotecario tiene, según la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Pontevedra, un interés ilegal, ya que está referenciado al IRPH, un tipo de interés solo válido para viviendas libres. La plataforma solicita en su caso la condonación de la deuda y un alquiler social en la misma vivienda.

-¿Cuándo comenzó su pesadilla?

-Mi pesadilla comenzó en el momento en que me separé, en 2010. Voy al banco a contarles mi situación y a decirles que iba a continuar pagando los dos préstamos que nos habían concedido: uno hipotecario y uno puente. Y así fue, puntualmente, hasta 2013, cuando perdí uno de mis dos trabajos. Hasta entonces, mis niños y yo comíamos en el trabajo, en el comedor escolar, y seguí haciendo frente a mi situación. Al quedarme solo con uno de los empleos me encontré con que solo ingresaba algo más de trescientos euros al mes.

-¿Y cuánto pagaba de los préstamos?

-Del préstamo hipotecario unos 376 euros y del puente 330.

-Unas cuotas imposibles de afrontar con su sueldo?

-Supuestamente, mi marido iba a pagar la mitad, pero se ha desentendido de todo. Además, sucedió que él fue detenido por otros motivos y la mitad del piso se lo embarga el Estado. Al no haber hecho separación de bienes, yo voy al banco y les pregunto qué puedo hacer. Ellos me respondieron que dejase ir el embargo arriba y que me buscase la vida. Yo pienso que si lo hago me voy a quedar sin deuda alguna, pero no, eso implica que te vayas de tu casa, te busques la vida y sigas pagando lo que está en deuda.

-Se habrá sentido totalmente desprotegida?

-Muy mal. Te sientes muy mal. Lo primero que piensas es "me mato, me suicido".

-Y con dos niños?

-Eso es lo peor. Tú te sacrificas, dejas de comer, pasas frío por no poner la calefacción? Lo peor son los niños.

-¿Son conscientes de la situación?

-Sí, sí lo saben. El mayor tiene 14 años y la pequeña 11.

-¿Y su familia?

-Mi familia me ayudaba. Hice un ingreso de 1.300 euros que me dejó mi madre, más de 800 que me dejó mi hermana? pero todo tiene un límite.

-¿Y ahora? ¿Qué paga?

-El préstamo hipotecario ya no porque está en el juzgado. Pago lo que puedo del préstamo puente. Ellos me dicen que ingrese lo que pueda, pero no vale de nada, porque todo sigue sumando intereses.

-¿En qué momento entra en contacto con la Plataforma de Afectados por la Hipoteca?

-Cuando le retienen en la cuenta a los avalistas del préstamo puente, mi hermana y mi ex cuñado, cerca de 3.000 euros. Estoy tan desesperada que me pongo a buscar préstamos rápidos por internet y llega un momento en que me pregunto: "¿qué estoy haciendo de mi vida?". Entonces envío un correo electrónico a la plataforma.

-¿Qué es lo que demandan a la entidad bancaria?

-Lo que solicitamos es la dación en pago de carácter retroactivo. Un alquiler social y que se condone el total de la deuda.

-¿En algún momento le tranquilizaron las reuniones con la entidad bancaria?

-Sí. Sobre todo la primera. Llegamos a un acuerdo de pagar cien euros al mes para el préstamo puente. Pero en diciembre me piden que vaya por la oficina, donde me informan de que eso no puede continuar así. Es decir, que todo lo que me habían dicho en la anterior reunión se iba al garete. Ahí me salen con que hay que refinanciar la operación, que tienen que firmar los avalistas? Todo una mentira.

-¿De qué manera le presionaban?

-Con llamadas telefónicas constantes. Y si yo no cogía el teléfono, llamaban a los avalistas. Yo me sentí muy mal porque en el banco me vieron llorando, suplicándoles y les dio igual.

-¿Se sintió acosada?

-Te sientes acosada porque te llaman y les dices que no puedes, que no te da el dinero, y dejas de pagar la luz, por ejemplo, y te la cortan.

-¿Cuándo tuvo lugar la última reunión?

-Hace unas semanas, cuando me dijeron que para negociar tenía que irme de mi casa con mis niños.

-¿Sintió en algún momento arrepentimiento por haber comprado un piso?

-Sí. Yo estaba de alquiler antes de comprar.

-¿Se siente optimista?

-Desde que estoy con la PAH, estoy guerrera. Antes estaba llorando todo el día. La plataforma es mi familia.

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