Dos golfiños disfrutaron en la mañana de ayer de las tranquilas aguas de O Cavadelo, en Vilagarcía, y sorprendieron a marineros y paseantes que se hallaban en este entorno. La imagen de los dos cetáceos resultaba especialmente llamativa por la familiaridad con la que recorrieron una zona tan próxima al núcleo de población.

La pareja de delfines o arroaces se adentró desde la ría hasta el pantalán y recorrió la pequeña ensenada portuaria no sin antes ofrecer sus vistosas acrobacias, con saltos sincronizados y una exhibición bajo el agua que duró minutos.

Aunque la presencia de estos ejemplares de la familia de los delfines es infrecuente, no es la primera vez que en el puerto de Vilagarcía o el de Vilanova se pueden ver algunos ejemplares de este tipo de cetáceos, aunque no dejan de sorprender a quien tiene la oportunidad de disfrutar sus evoluciones.

Cabe recordar la historia de Gaspar, un delfín procedente de Ferrol y que le encantaba pasearse por lor puertos gallegos, donde obtenía alimento del público, incluido en el de Vilagarcía de Arousa. Fue bautizado con dicho nombre porque fue avistado por vez primera el dïa de Reyes y su buena relación con los humanos, en especial los niños, convocaba a decenas de personas en cada una de las radas a las que se aproximaba sin miedo.

En esta ocasión, los dos ejemplares de delfín disfrutaron de varios minutos en las recogidas aguas vilagarcianas, como recoge el vídeo que un aficionado envió ayer a la redacción de FARO DE VIGO.

La población de delfines en la ría arousana es muy amplia y de hecho se forman expediciones para avistar estos bellos ejemplares de mamíferos marinos. La presencia de la pareja coincidió con el cambio de tiempo por lo que la presencia de personas en el paseo marítimo o en la zona portuaria era más bien baja, lo que animó la entrada y el completo recorrido que realizaron.