El cuatripartito de Cambados denunció en el último año en dos ocasiones sendos presuntos ataques informáticos. Lo hizo en ambas ocasiones ante la Guardia Civil, y en el primer caso la denuncia fue archivada. En el segundo, el portavoz del Ejecutivo local aseguró que habían intentado acceder con contraseñas falsas al Portal de Transparencia, que el cuatripartito ha puesto en marcha en cumplimiento de una ley estatal de 2012.

En Ribadumia, el tripartito declara que ha sido imposible restaurar las copias de seguridad del servidor informático de las fechas anteriores al 12 de junio del pasado año (fecha en que cambió el gobierno municipal), a pesar, añade el gobierno, que el sistema estaba programado para conservar dichas copias durante casi tres años.

El informe de la auditoría añade que también faltan dos de los discos duros de almacenamiento de las copias realizadas, y según el equipo de David Castro, fueron sustituidos el 11 de junio, "no encontrándose en el Ayuntamiento el volumen anterior".

Finalmente, en el informe de la empresa contratada por el grupo de gobierno se indica que no es posible recuperar los datos borrados con programas de recuperación de archivos, "al ser el disco duro sobreescrito con caracteres hexadecimales aleatorios".

Un cambio de 180 grados

En Ribadumia se produjo hará en junio un año un cambio político de 180 grados, al perder la Alcaldía el Partido Popular. Los conservadores se quedaron a un concejal de la mayoría absoluta, y un acuerdo a tres bandas entre Independientes (con cuatro ediles), Somos Ribadumia y el PSOE (con uno cada una de estas dos formaciones) supuso el desalojo de Salomé Peña de la Alcaldía. Poco después, Rafael Louzán también se vería despojado de la Diputación.