Los daños causados por el tornado del pasado 6 de febrero en las fachadas y cubierta del pabellón de deportes de Xil ascienden a 129.468 euros. Esta es la cifra que maneja el concello de Meaño después de un informe emitido por técnicos a los que fue encargado un peritaje de los daños. El referido informe concluye que los muros de bloque de cierran el pabellón han sido parcialmente derribados, otros están agrietados o desplazados, que parte de la cubierta ha volado y que existen chapas colgando que amenazan la seguridad de la zona y su entorno.

El concello pretende reconstruir las dos fachadas del pabellón que han sido dañadas levantando para ello una perfilería metálica que sustente el material de acabado en vidrio y paneles de policarbonato multicelda, lo que permitiría asegurar el uso de las referidas instalaciones.

Cabe señalar que el grupo de gobierno pretendía la reconversión de este pabellón, que estaba infrautilizado y que presentaba problemas con la condensación, en un centro deportivo tipo gimnasio. Respondía la propuesta a un compromiso electoral que había adquirido Partido Popular en las últimas municipales, si bien los daños ocasionados por el tornado de febrero trastocaron e buena parte el proyecto y los plazos para esta reconversión.

De momento, cumplidos los dos meses del fenómeno meteorológico que causó importantes daños en Xil y Dena, todavía no se ha realizado actuación alguna en el pabellón, lo que ha comenzado a levantar algunas quejas vecinales. De ellas se hacía eco hace unos días Meaño Independiente que instaba al gobierno local a adoptar medida como "la retirada de escombro y asegurar las partes con peligro de desprendimiento", con el objeto cuando de menos de permitir la reapertura del vial que sube hacia el monte -y que pasa por el lado del pabellón- y que da servicio a los vecinos que quieren acceder a sus propiedades en los montes de zona.

Por el momento el gobierno local trabaja buscando algún tipo de financiación para acometer a través de los programas FEGAMP y la Xunta de Galicia, así como tramitando las pertinentes autorizaciones para acometer dicha reconstrucción. Entre ellas se requiere de un permiso de la Dirección Xeral de Patrimonio de la Xunta, por cuanto la obra se ve afectada por la cercanía del iglesario de Xil, con su vieja rectoral, su hórreo y la iglesia, estructuras éstas que, pese a la inmediatez a la zona afectada, no se vieron dañadas por el tornado el pasado 6 de febrero.